Identidican en Valladolid a un hombre de 31 años como autor de varias estafas y cobro fraudulento de cheques y pagarés

Actualizado: viernes, 29 diciembre 2006 20:28

VALLADOLID, 29 Dic. (EUROPA PRESS) -

Un hombre de 31 años cuya identidad responde a las iniciales E.S.F. fue identificado como presunto autor de diversas estafas, suplantación de identidad de varias personas y cobro fraudulento de cheques y pagarés que previamente habían sido sustraídos y falsificados, según informaron a Europa Press fuentes de la Policía Nacional.

La identificación de este hombre, al que se han instruido las oportunas diligencias, es fruto de una investigación llevada a cabo durante el último mes por parte del Grupo de Delincuencia Económica adscrito a la UDYCO de la Brigada Provincial de la Policía Judicial de Valladolid.

Los hechos se remontan al pasado 17 de noviembre cuando a media mañana fueron sustraídas tres sacas de correos a otros tantos carteros presumiblemente cuando procedían a su reparto en los polígonos industriales de la capital vallisoletana. Las mismas fuentes policiales informaron de que estas sacas contenían correo comercial, un sistema utilizado por algunas empresas para hacer pagos, especialmente cuando son de escasa cuantía.

Al parecer, estos documentos mercantiles fueron falsificados íntegramente por medios técnicos e informáticos en el proceso conocido como 'lavado' y fueron presentados bajo nombres falsificados de personas ajenas al delito y cuya personalidad se usurpó al cobro en las respectivas entidades financieras por individuos conocidos como pasadores o cobradores.

Las mismas fuentes de la Policía Nacional explicaron que se trata de "organizaciones complejas" en las que normalmente unos logran hacerse con documentos mercantiles, como ha ocurrido en este caso en Valladolid, sustrayendo de diferentes formas la correspondencia de empresas que utilizan el correo para el envío de tales documentos.

Asimismo, otros grupos ya especializados falsifican el talón o pagaré aumentando o disminuyendo la cantidad a cobrar normalmente para no sobrepasar la cantidad de 3.000 euros con el fin de no activar las precauciones específicas de la entidad financiera y finalmente otro grupo acude a los bancos con los documentos falsificados.

En este sentido, la Policía Nacional aprovechó la ocasión para aconsejar a las empresas que utilicen para la remisión de documentos mercantiles sistemas de envío más seguros para no facilitar la labor de los delincuentes dedicados a este tipo de actividades.