La Junta aprobará el día 11 la Estrategia de mejora de calidad del aire

El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, durante la presentación de las medidas de la Junta contra el cambio climático.
El consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, durante la presentación de las medidas de la Junta contra el cambio climático. - JCYL

   VALLADOLID, 5 Jun. (EUROPA PRESS) -

   La Junta de Castilla y León llevará para su aprobación al Consejo de Gobierno del día 11 de junio la Estrategia de mejora de la calidad del aire y en "próxima semanas" la que se refiere a la Economía Circular.

   Así lo ha asegurado el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, durante una rueda de prensa en la que ha explicado los compromisos con el cambio climático recogidos en un decálogo de medidas, que ha presentado coincidiendo con el Día Mundial del Medio Ambiente tras aprobarse ayer en el Consejo de Gobierno.

   Suárez-Quiñones, quien ha destacado esta jornada como día de "reflexión" de los comportamientos que se tienen respecto al medio ambiente, ha advertido de que estas medidas no son "etéreas" o "meras expresiones de voluntad" sino que tienen como objetivo un compromiso de la Comunidad contra el cambio climático y da "satisfacción" a las obligaciones "morales e internacionales" en el marco del acuerdo 2030 de Naciones Unidas y los objetivos de desarrollo sostenible, concretamente el referido al cambio climático.

   Entre las diez medidas que se contemplan, una de las primeras en ponerse en marcha será la que se recoge en el punto seis, la aprobación de la Estrategia para la Mejora de la Calidad del Aire de las ciudades, que se llevará al Consejo de Gobierno de la próxima semana, el 11 de junio, según ha anunciado el consejero.

   Esta estrategia establecerá las bases para la mejora de la calidad del aire en el periodo 2020-2029 para cumplir con los criterios que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS) e implicará mejora de información a la ciudadanía, medidas dirigidas a la industria, al sector residencial, el agrícola y el ganadero, del transporte y medidas concretas para la reducción de contaminación con ozono que, aunque no es una problemática importante en Castilla y León, sí hay zonas donde se producen superaciones puntuales.

   A este respecto, el consejero ha apuntado que el comportamiento del ozono no está aún muy establecido científicamente y además se dependerá de un plan nacional, pero se elaborará un plan específico para las zonas en las que se registran superaciones de niveles en la Comunidad.

   Suárez-Quiñones ha explicado que, por ejemplo, en Valladolid, donde se producen avisos de forma más habitual que en otros sitios, el Ayuntamiento toma como referencia las recomendaciones de la OMS, más exigentes que los que establece la normativa como obligatorios, que se cumplen en toda Castilla y León.

"FRACASO" DE LA ECONOMÍA LINEAL

   Otra de las cuestiones que se aprobarán "en las próximas semanas" en el Consejo de Gobierno será la Estrategia de Economía Circular de Castilla y León, basada en una economía regenerativa que contribuya a cerrar los ciclos naturales y tecnológicos y optimice el uso de los recursos, minimizando las emisiones de CO2.

   El consejero ha explicado que cuenta con cuatro líneas estratégicas, 17 programas de trabajo y 72 medidas específicas en las que será "muy relevante" la I+D+i y la apuesta por la simbiosis industrial, la bioeconomía, el consumo responsable y el residuo "cero", todo ello como punto de partida "muy relevante" del cambio del modelo productivo.

   Suárez-Quiñones ha explicado que se trata de cambiar el "paradigma de economía lineal", de producir con recursos energéticos no renovables y generar residuos, que está "abocada al fracaso", por otra "circular", con menos recursos energéticos, de fuentes renovables, consumo responsable con residuo que sea lo menor posible y que sea renovable.

   La Estrategia ya se encuentra redactada, se someterá a audiencia final a los interesados la semana que viene y en próximas semanas al Consejo de Gobierno.

   Por otro lado, el primero de los puntos del decálogo, aprobar un Anteproyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética en Castilla y León, se encuentra muy avanzado.

   El anteproyecto, que persigue definir objetivos de reducción de emisiones y de penetración de energías renovables y de mayor eficiencia en el uso de la energía, para llegar a un modelo productivo y social acorde, busca una transición a un modelo energético sostenible y contempla un grupo de trabajo interdepartamental que comprobará la ejecución de medidas y supervisará las mismas.

   A este respecto, el consejero ha recordado que el 19 mayo el Gobierno de España aprobó su propio proyecto, el cual será imprescindible para poder coordinarse y que la ley de Castilla y León se integre en la nacional. Así, el anteproyecto de ley ya está "sustanciado", en su consulta previa con sugerencias está "en marcha".

OTRAS MEDIDAS

   El decálogo, por otro lado, también contempla en uno de sus puntos incrementar la producción de energía procedente de fuentes renovables y fomentar el autoconsumo eléctrico, así como aprobar la Estrategia de Energía Térmica Renovable de Castilla y León e impulsar la nueva Estrategia de Eficiencia Energética.

   Suárez-Quiñones ha explicado que la Comunidad genera 10.534 megavatios a través de energías renovables, 1,5 veces más que las necesidades de consumo, y tiene capacidad de hasta 8.000 megavatios más de instalación. Además, ha añadido que el Ente Regional de la Energía (EREN) elabora la estrategia energía térmica renovable.

   Otro de los compromisos es la aprobación de un Programa para mejorar la eficiencia energética y reducir el uso de combustibles fósiles en edificios administrativos titularidad de la Junta, que son más de 1.000, y que actualmente tienen un consumo de calor elevado. Por ello, se aboga por la implantación de la biomasa, que tiene numerosas ventajas, de forma individual o a través de las redes de calor.

   El cuarto de los puntos recogidos en el decálogo establece que, en los procedimientos para la adquisición de nuevos vehículos por la Administración, se priorice que estos tengan ECO o 0, dando preferencia a los híbridos enchufables y los eléctricos puros, siempre que los usos previstos lo permitan. El consejero ha recordado que hay una flota de 1.740 vehículos.

   El quinto compromiso es promover, en colaboración con los municipios de más de 10.000 habitantes, el desarrollo de áreas urbanas de cero/bajas emisiones.

   Para ello, se fomentará la rehabilitación, la regeneración urbana y la eficiencia energética, una línea de trabajo ya emprendida por la Junta, pero para la que también el Ejecutivo autonómico, como hizo este jueves en Conferencia Sectorial de Vivienda, va a continuar insistiendo en que el Plan Estatal de Vivienda tenga un desglose que establezca, además de las ayudas al alquiler, una línea para la renovación y regeneración.

   El octavo punto del decálogo consiste en un Plan de Acción Forestal por el Cambio Climático de Castilla y León, en colaboración con los propietarios y productores forestales, que incluirá 15.000 nuevas hectáreas de bosque y la plantación de más de 20 millones de árboles en esta legislatura. Se encuentra en redacción y se a lo largo de esta legislatura se aprobará, pero la plantación ya se está realizando, ha puntualizado el consejero.

   Por otro lado, hay un compromiso de reforzar la política de gestión de residuos, haciendo un especial esfuerzo en la fracción orgánica, que supone el 40 por ciento del millón de toneladas de residuos domésticos al año que se producen en Castilla y León. Para ello, se tratará de hacer un esfuerzo de inversiones para que el contenedor marrón avance en los municipios de más de 5.000 habitantes y se haya avanzado de forma importante en esta gestión a finales de 2021.

   De la misma forma, ha señalado el consejero, se fomentará en las poblaciones más pequeñas el compostaje y biocompostaje en el marco de la nueva ley estatal de residuos.

   Finalmente, el último de los compromisos es desarrollar un programa reforzado de Educación Ambiental que implique a todos los sectores de la sociedad porque "en la suma está el éxito".