ZAMORA, 17 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Junta de Castilla y León procedió al sacrificio de 83 vacas de raza sayaguesa que estaban abandonadas y que pastaban sin control sanitario en las inmediaciones de la localidad zamorana de Villardiegua de la Ribera.
El sacrificio, llevado a cabo en el matadero de Medina de Rioseco (Valladolid), ha mermado "seriamente" el censo de una raza considerada en peligro de extinción y de la que apenas quedan medio millar de reproductoras y mil ejemplares censados.
Según afirmó hoy el delegado territorial de la Junta de Castilla y León en Zamora, Alberto de Castro, el sacrificio ha sido una medida obligada a la vista de que su propietario no tenía las reses en las debidas condiciones higiénico sanitarias.
Las vacas, según habían denunciado los vecinos de Villardiegua en repetidas ocasiones, pastaban abandonas por las inmediaciones del pueblo provocando daños y molestias.
El saneamiento sanitario de los animales habría requerido, según De Castro, la inmovilización de los ejemplares en una explotación y un periodo de tiempo cercano al año, algo que no ha querido asumir ningún ganadero de los que habitualmente trabajan con esta raza ni la asociación de criadores de sayaguesa.
En los próximos días los servicios veterinarios de la Junta procederán a la captura y posterior sacrificio de la quincena de reses que todavía vaga en libertad por el término municipal de Villardiegua. Para estas reses, si no aparece algún ganadero dispuesto a su regularización, el destino también será el matadero de Medina.
El delegado territorial de la Junta defendió hoy la legalidad de las medidas adoptadas por la Consejería de Agricultura, que disponía de una autorización judicial para llevarse las vacas debido al riesgo sanitario que suponía su presencia en los alrededores del pueblo sin ningún control.
