Juzgan desde hoy a un hombre que en 2009 tiroteo a un vecino de Villanueva de Duero (Valladolid)

Actualizado: miércoles, 1 diciembre 2010 7:41

El procesado, al que se imputan numerosos delitos, uno de ellos de tentativa de homicidio, se expone a 19 años de prisión

VALLADOLID, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia de Valladolid juzga a partir de hoy a un hombre con iniciales P.G.R, para quien el Ministerio Fiscal solicita un conjunto de penas que suman 19 años de cárcel por el tiroteo protagonizado en junio de 2009 en Villanueva de Duero, donde hirió de gravedad a un vecino, y la peligrosa huida posterior a bordo de un vehículo durante la cual puso en peligro la vida de otros automovilistas e incluso de los agentes que finalmente le detuvieron.

En su escrito de calificación provisional de los hechos, la acusación pública imputa al procesado un delito de homicidio en grado de tentativa, otro de lesiones, un delito contra la seguridad del tráfico, otro de atentado en concurso con un delito de daños y tenencia ilícita de armas, de ahí que la suma de las penas solicitadas se eleve a más de 19 años de prisión, junto con el pago, en concepto de indemnizaciones, de más de 19.000 euros.

Los hechos se remontan a las 15.00 horas del día 22 de junio de 2009, cuando el acusado mantuvo una discusión con varias personas a las puertas de una peña situada en la calle Calvario de Villanueva de Duero, tras la cual P.G.R. se ausentó del lugar no sin antes amenazar a los allí presentes en términos de "¡no sabéis con quién os habéis metido, os vais a acordar de esto y no os preocupéis, que ahora vuelvo!".

Minutos después, siempre según el Ministerio Fiscal, el imputado se personó a bordo de un vehículo buscando a las personas con las que había tenido el enfrentamiento y fue entonces cuando exhibió una pistola por la ventanilla del copiloto con la que efectuó cuatro disparos. Se detuvo al final de la calle y realizó más disparos al aire al grito de "¡venid ahora si os atrevéis!", momento en el que dos personas, José Luis S.B. y Ángel P.A, se dirigieron hacia él y éste dio un tiro al primero "con la intención de matarle", como así entiende el acusador público, al tiempo que arrancó a toda velocidad y arrastró consigo al segundo que se había aferrado a la puerta del conductor.

En primero de los lesionados, que fue alcanzado gravemente por un proyectil en la zona abdominal, sufrió un traumatismo hepático y renal derecho que obligó a someterle a una intervención quirúrgica en la cual hubo de extirpársele el riñón derecho, mientras que Ángel P.A. sufrió lesiones consistentes en una abrasión en el hemitórax derecho, así como erosiones en la palma derecha y una agravación del trastorno psiquiátrico previo que padecía.

Con posterioridad a esa doble agresión, el procesado se dio a la fuga en un vehículo en el que recogió a su mujer y tres hijos pequeños y se dirigió a Valladolid, trayecto en el que puso en peligro la vida de distintas personas al realizar giros prohibidos y adelantamientos antirreglamentarios, todo ello en zonas pobladas y de actividades deportivas, tales como la CL-601, la calle Arcas Reales, el Camino del Abrojo y la urbanización del Pinar de Antequera.

Finalmente, a la altura de la calle Limonero de Valladolid un vehículo de la DGT logró darle alcance y ponerse a su altura, si bien el procesado efectuó entonces una maniobra brusca para, sin conseguirlo, echar de la vía al vehículo policial, hasta que ambos turismos quedaron cruzados en la calzada.

"¡QUE SOY COLEGA DE EL RUBIO!"

El procesado fue entonces detenido, no sin antes ofrecer una fuerte resistencia y amenazar a los agentes actuantes con frases del tipo "¡por 600 euros voy a coger a un sicario para mataros, os voy a matar maricones, valéis 300 euros, voy a mataros a vosotros y a toda vuestra familia, yo iré a prisión pero vosotros vais al hoy, que soy colega de El Rubio!"

Una vez reducido, los agentes inspeccionaron el turismo y encontraron dos pistolas, una con número de serie y la segunda sin él y modificada, así como tres cargadores sin marca y dos de la marca Firestar.

La primera había sido sustraída en Boecillo en el año 2005 y la segunda, la del número borrado, es un arma prohibida al haberse modificado sus características.