El Museo de la Minería de Sabero (León) acoge una exposición sobre el pasisaje cultural de las cuencas mineras

Actualizado: lunes, 17 marzo 2014 12:27

LEÓN, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

El Museo de la Minería y la Siderurgia, ubicado en la localidad leonesa de Sabero, acoge desde mañana la exposición 'Aprendiendo de las Cuencas. Los artefactos de la memoria' que pretende dar a conocer la investigación llevada a cabo por 'zon-e arquitectos' sobre el paisaje cultural de las Cuencas Mineras Asturianas.

Esta investigación de las cuencas mineras de Asturias se ha realizado a partir de un trabajo de campo en el que se han identificado y catalogado aquellos ejemplos de arquitecturas o elementos urbanos que insinúan un desplazamiento con respecto a lo canónico, siguiendo el análisis que sobre Los Ángeles, Las Vegas, Nueva York y Tokio, hicieron Reyner Banham, Robert Venturi y Denisse Scott Brown, Rem Koolhaas y el Atelier Bow-Wow.

El trabajo "es de un gran interés" por su relación inequívoca con las cuencas mineras de Castilla y León ya que la singularidad paisajística y arquitectónica de los territorios mineros es común a todos ellos.

Del interés por divulgar este trabajo realizado en torno al patrimonio minero asturiano y estimular la comparación con este mismo patrimonio en Castilla y León, surge la idea de acoger la exposición en el Museo de la Siderurgia.

En la sala se mostrarán los resultados del trabajo de documentación y catalogación realizado durante el proceso de investigación con voluntad analítica y divulgativa.

Así, podrán verse las referencias bibliográficas del estudio, los ejemplos más destacados de los "artefactos", palabra con la que los comisarios se refieren a las arquitecturas híbridas que son el núcleo de este proyecto, y la obra sinfónica de Flores Chaviano, vinculada a la memoria de los valles mineros de Asturias.

Tras 51 incursiones de exploración a las cuencas asturianas, 5.615 kilómetros recorridos y 4.391 fotografías tomadas se han seleccionado 40 ejemplos de las arquitecturas híbridas de entre los 1.001 catalogados que pueblan la superficie de este territorio. Todos ellos llevan inscrito en su código genético el conflicto entre diferentes paisajes sobre los que se levantan.