Una periodista invidente de Valladolid relata en un blog cómo se vive "sin ojos" en el siglo XXI

Patricia Carrascal posa con su perro guía
EP
Actualizado: domingo, 6 junio 2010 14:26

Es una de los pocos usuarios de perro-guía en España que cuenta con un can entrenado en la Escuela de Rochester (Estados Unidos)

VALLADOLID, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -

La curiosidad y ese interés por escribir y comunicarse de todo periodista alentó a Patricia Carrascal, natural de Valladolid, a recuperar en un blog todas aquellas vivencias de alguien cuyos ojos no pueden ver pero que, igual que el resto, puede "sentir, pensar y ser persona".

Patricia es ciega desde su niñez. Debido a un problema de córnea, sólo ve un 0,1 por ciento por el ojo derecho pero su inquietud por descubrir y los avances de la ciencia no le han dejado atrás en cuanto a tecnología y accede a la web 2.0, a través de un lector de pantalla, como cualquier usuario.

En su rincón personal de Internet,'Viviendo a tientas' (www.viviendoatientas.blogspot.com), revive especialmente su día a día al lado de Brilyn, su perra-guía, a la que fue a buscar a la escuela de Rochester (Michigan, Estados Unidos) en octubre del año pasado. Patricia forma parte del pequeño porcentaje de invidentes en España que optó por un animal entrenado en la ciudad norteamericana, en el centro Leader Dogs for the Blinds.

En la actualidad, en el país existen 900 usuarios de perros-guía --30 en Castilla y León_y sólo un 20 por ciento de los canes proviene de allí. Así, cuando la escuela de Boadilla del Monte (Madrid), la única en España, no puede asumir la demanda de animales, la Fundación ONCE, en virtud de un convenio con la organización Lions Club International, ofrece al invidente la posibilidad de viajar al centro americano a buscar uno.

"Llevaba tres años esperando un perro y aún me quedaban otros dos, así que me animaron a irme allí y en mayo me llamaron para salir hacia Rochester con otras cinco personas", explicó a Europa Press.

En su blog, relata al detalle el primer contacto con su Golden Retriever --"fue lo mejor de la estancia", recalca--, el "duro" proceso de aprendizaje de la guía, la vuelta a España en el avión o la adaptación de Brilyn a la capital vallisoletana y la cultura española.

"En España las calles son muy ruidosas y al principio se asustaba mucho, pero la adaptación fue rápida, sobre todo con las personas. Al principio, para que no se estresara, empezamos haciendo rutas fáciles por la ciudad y poco a poco ampliamos el recorrido", apunta Patricia Carrascal, quien incide en que desde su llegada los vallisoletanos se han mostrado "respetuosos" con su acompañante.

"Hay un montón de personas que se paran por la calle para tocar y acariciar a la perra para decirme lo preciosa que es, y tengo que decirles que por favor no la toquen, que va trabajando y que si no se me distrae", señala no obstante.

AMANTES DE SU TRABAJO.

Esta joven periodista documenta su espacio con artículos sobre asuntos como el entrenamiento de perros y acerca al lector algunas claves del arte de la guía. El denominado 'park time' (tiempo propio para las necesidades y el ocio del animal) o el 'gentle leader' (un tipo de collar para que el can no se distraiga) son conceptos que la autora repite constantemente en sus entradas, cuyas líneas llena con anécdotas a modo de informe y puesta en común.

"Es una perra a la que le encanta hacer su trabajo. En cuanto le pones el arnés y empieza a guiar, se relaja, se pone en plan profesional y va moviendo la cola, tan contenta, porque le gusta mucho ir guiando y sentirse útil. Eso sí, después, cuando llegas a tu destino, también le gusta que se lo agradezcas con una buena sesión de caricias y de alabanzas", reconoce.

Como Brilyn, Patricia es también una amante de su trabajo. Desde el pasado mes de marzo es responsable de un departamento de prensa en Valladolid. "Se trata de una gran oportunidad para demostrar lo que sé hacer y me gusta", cuenta. "Con un ordenador con 'Jaws' y un teléfono también con un programa de voz puedo trabajar como cualquier persona", asegura.

En su empresa, centrada en aspectos sociales tanto en su filosofía como en sus contenidos, esta periodista desempeña su labor junto con otras personas con discapacidad. "Se pretende dar ejemplo de que un discapacitado puede hacer el mismo trabajo, yo me siento muy integrada porque además aprendemos unos de otros", señala.

De momento, según indica en su diario de Internet, las aspiraciones profesionales de Patricia en su nueva etapa son "disfrutar al máximo cada día, aprender todo lo posible y tratar de dar lo mejor de sí misma". En lo personal, su deseo es conseguir que, como en otras comunidades autónomas, los usuarios de perros-guía de Castilla y León se agrupen en torno a una sociación para intercambiar experiencias y poder obtener ventajas para el cuidado de sus animales.