SORIA, 18 Nov. (EUROPA PRESS) -
La localidad soriana de Tardelcuende ha finalizado su campaña resinera con una recogida de 320.000 kilogramos de miera, lo que supone un promedio por entalladura de 2,105 kilos y por pino de 2,67 kilos, según los datos proporcionados por el Ayuntamiento pinariego.
De este modo, tal y como ha indicado el Consistorio en sus estimaciones a fin de campaña, los ingresos se traducen en 336.000 euros, de lo que ha supuesto la explotación de 120.000 pinos resineros.
El alcalde de Tardelcuende, Ricardo Corredor, ha hecho hincapié en que "unos montes sin utilidad ahora dan unos beneficios de 336.000 euros", de los que el Ayuntamiento percibe unos ingresos de 24.480 euros por el arrendamiento del monte.
En esta temporada resinera han participado un total de 30 trabajadores, "de los que 21 la resina es su única actividad económica y para nueve es un trabajo complementario", y entre los resineros ha habido una mujer.
"Cada año es mayor el número de pinos que el de entalladuras, por lo que en breve Tardelcuende llegará a los 2,5 kilos por entalladura", ha apostillado el primer edil.
ADJUDICACIONES DIRECTAS, LA NOVEDAD
Entre las novedades de la campaña que ha concluido, cabe reseñar que en esta ocasión se han podido efectuar adjudicaciones directas de los pinos a los resineros, por lo que han tenido la posibilidad de ser incluidos en el Régimen Especial Agrario por parte de la Seguridad Social.
En cuanto a los compradores de miera, han sido tres las empresas que han adquirido resina: Unión Resinera Española, Resinas Naturales y Alfonso Criado.
La resina se ha vendido a 1,05 euros en destilería, 0,05 euros más que el año pasado.
Otra de las novedades ha consistido en que varios resineros han trabajado con la denominada pasta A21 para la extracción de la miera, "confeccionándola ellos mismos bajo la supervisión del Ayuntamiento".
Además, en esta temporada "varios resineros también se han acogido a la ayuda de 1.500 euros de la Diputación de Soria".
Entre los nuevos resineros que se han incorporado este año (en 2013 fueron 19) se han repartido entalladuras de los tranzones llamados 'a muerte', de menor rendimiento resinero, "pero de mayor comodidad para el trabajo".
