BURGOS, 6 May. (EUROPA PRESS) -
Más de medio centenar de trabajadores del Grupo Antolín-Dapsa, de Burgos, se manifestó esta mañana por las calles del centro de la ciudad en contra del expediente de regulación de empleo que plantea la dirección de la empresa y que contempla la rescisión de 24 puestos de trabajo de mano de obra directa y 10 de indirecta.
En este sentido, el presidente del Comité de Empresa, Constantino Rubio, explicó que después de un mes de negociaciones los trabajadores y los directivos no han alcanzado ningún acuerdo.
Los representantes de esta plantilla de 174 trabajadores piden que se incentiven las bajas voluntarias con cuantías de 40 días por año trabajado para evitar los despidos. Según Rubio, en un principio la empresa admitió esta posibilidad aunque "ahora se ha echado para atrás".
El Comité de Empresa exige también que, de llevarse a efecto el expediente de regulación de empleo, la empresa recoloque a los restantes trabajadores aunque "será difícil" ya que en el Grupo Antolín, entre empresas y subcontratas trabajan más de 2.000 personas.
La dirección ofertó la recolocación de varios operarios de mano de obra indirecta y directa a otras plantas del grupo, pero el Comité de Empresa rechaza que parte de los afectados por el expediente tengan que trasladarse a la planta de Vigo.
Constantino Rubio expresó su temor de que este expediente constituya una fórmula "encubierta" de iniciar el proceso de cierre o traslado de otras plantas del Grupo.
El Grupo Antolín Dapsa, con sede en Burgos, se dedica a la fabricación de partes, piezas y accesorios no eléctricos para vehículos de motor.
