Entristecido por el "lamentable espectáculo" de la Junta recuerda que hay que centrarse en la vida real y no en ofrecer una serie de TV
VALLADOLID, 29 May. (EUROPA PRESS) -
El secretario regional del PSOE y portavoz del Grupo Parlamentario Socialista, Luis Tudanca, ha considerado "una vergüenza" que un año después de la celebración de las elecciones autonómicas Castilla y León siga intervenida por las direcciones de PP y de Ciudadanos en Madrid coartando la autonomía de este territorio.
"No puede ser que las decisiones se sigan tomando allí", ha advertido Tudanca que se ha referido tanto a los criterios "cambiantes" de Castilla y León en las fases de desescalada, como a la posición sobre el estado de alarma o al nombramiento de los consejeros, como ha ocurrido, a su juicio, con la designación de Ana Carlota Amigo como nueva titular de Empleo e Industria.
Tudanca ha lamentado al respecto que el presidente de la Junta, el 'popular' Alfonso Fernández Mañueco, esté siendo "incapaz" de "imponer" su criterio en Génova, en detrimento de los intereses de Castilla y León, en una actitud de ponerse "de perfil". "Con tal de seguir en el poder, lo que le digan en Génova", ha sentenciado el secretario regional del PSOE quien, tras criticar el "grave daño" que está haciendo esta actitud a Castilla y León, ha sido tajante al advertir de que esta tierra no se puede permitir "estar sin voz" más tiempo.
A esto ha unido que las "luchas intestinas" en el seno del Ejecutivo de coalición entre PP y Ciudadanos y entre consejerías, con una referencia expresa a Sanidad y a Familia, que se han saldado con una "crisis de gobierno" --la renuncia del consejero de Empleo, Germán Barrios-- en mitad de la lucha contra crisis sanitaria, social y económica generada por la pandemia del coronavirus "están perjudicando" a la Comunidad y "van a pasar factura".
"Es absolutamente inconcebible (...) Igea y Mañueco han provocado una crisis de Gobierno inédita en toda España", ha considerado el secretario regional del PSOE que ha ironizado sobre la "perversión del lenguaje" que está aplicando la Junta al asegurar que el cambio en la Consejería de Empleo da mayor estabilidad y fortaleza. "Cuanto más dicen quererse peor se llevan", ha continuado Tudanca en su reflexión para insistir en la "inestabilidad" de un Gobierno "más preocupado y ocupado" en la "lucha de poder a toda costa" bajo las directrices de Madrid.
"Se piensan que la gente es tonta", ha continuado tras evidenciar que el vicepresidente de la Junta ha aprovechado el cambio en Empleo para ampliar la estructura de este departamento y para colocar a sus afines de Ciudadanos --"una parte del partido", ha ironizado al respecto--. "Con los votos de Castilla y León conforman sus alianzas e imponen desde Madrid que hacer con nuestro Gobierno, es tan claro y evidente", ha lamentado para afear el nuevo "reparto de la tarta" que ha hecho Ciudadanos al separar sus facciones entre el Ejecutivo y el Legislativo, como hizo anteriormente en gobiernos municipales y en diputaciones.
"La vida sigue igual, tú te quedas con el Gobierno yo con el grupo y todos tan contentos", ha espetado Tudanca que ha confesado que le "entristece mucho" el "lamentable espectáculo" y el "circo" que se está representando en la Comunidad cuando, según ha recordado, lo importante es centrarse en la vida real de la gente y no en una serie de TV.
Tudanca ha reivindicado en todo momento la responsabilidad con la que está actuando el Partido Socialista para sentenciar: "Es más responsable la oposición que el Gobierno (...) no pasa en ningún sitio".
Finalmente, ha deseado toda la suerte a la nueva consejera de Empleo, la exportavoz del Grupo Parlamentario Ciudadanos, Ana Carlota Amigo, desde el convencimiento de que su suerte será "la de todos" ante los "enormes retos" que ha dejado "una crisis sin precedentes". Diálogo, capacidad de gestión, inteligencia y astucia son algunos de los consejos que ha trasladado Tudanca a Amigo en un momento en el que, según ha lamentado también, se ha debilitado mucho la capacidad de interlocución con el Diálogo Social.
"Honestamente, no tengo muchas esperanzas", ha asumido a renglón seguido el dirigente socialista que no ha dudado al asegurar que sería el primero en alegrarse por haberse equivocado desde el convencimiento de que lo mejor para Castilla y León sería poder tener un "Gobierno fuerte".
