BURGOS, 9 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las personas desalojadas del inmueble número seis de la plaza de Vega de la capital burgalesa comenzaron hoy una "vigilia permanente" a la puerta del edificio afectado en señal de repulsa a la decisión del Ayuntamiento de Burgos de derribar el inmueble para "mejorar" el entorno urbanístico de la zona.
Según pudo recoger Europa Press de un comunicado de los vecinos afectados, "se trata de una vigilia en defensa del patrimonio y contra la especulación y el perverso plan inmobiliario que el Ayuntamiento quiere realizar en la céntrica plaza de Vega".
El pasado día cuatro de septiembre un juzgado de la ciudad autorizó al Consistorio burgalés a proceder en el derribo de este inmueble, después de varios años de litigios judiciales.
La decisión de la demolición de esta esquina de la plaza se remonta a 2004, cuando el Ayuntamiento de Burgos decide derribar toda una manzana de la plaza con el "pretexto" de solucionar el embudo de tráfico que se produce en la zona.
Por esta razón, se redacta un proyecto de ampliación de calzada y aceras que pasa por la demolición de varios edificios y una urbanización total del entorno.
Posteriormente, la comunidad de propietarios del número seis de plaza de Vega gana un recurso en los tribunales burgaleses, con el objetivo de paralizar el derribo. Un recurso que impone una fianza de 300.000 euros a los vecinos para hacer efectiva esta paralización. Algo que la comunidad de vecinos calificó de "improcedente, si se tiene en cuenta la ubicación y la protección que tiene el edificio según el Plan General de Ordenación Urbana".
Además, los vecinos aseguran que esta decisión ha provocado "serios daños en la salud de algunos propietarios", por lo que exigen la conservación del inmueble y su consiguiente rehabilitación.
