BARCELONA, 20 Nov. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Agricultura, Ganadería, Pesca, Alimentación y Medio Natural de la Generalitat, Josep Maria Pelegrí, ha defendido su compromiso con la ejecución del canal Segarra-Garrigues y la comunidad de regantes.
En declaraciones a Europa Press, Pelegrí ha explicado que la administración catalana debe 94 millones de euros para una parte del canal principal, una cuota que no paga desde 2006, época en la que gobernaba el tripartito, pero ha recordado que el Gobierno adeuda a la comunidad catalana más de 1.000 millones procedentes de la Disposición Adicional Tercera del Estatut.
"Su política es reclamar las deudas a las comunidades autónomas y no cumplir con ninguna de sus obligaciones", ha asegurado el conseller, quien ha indicado que en el fondo no se trata de esta infraestructura, sino de ahogar, según ha dicho, a las comunidades para volver a un Estado centralista.
Pelegrí responde así al ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, que este martes ha criticado que al final de año la deuda de la Generalitat con el Estado por las obras del canal Segarra-Garrigues de Lleida será de 94 millones.
"Ni en 2009 ni en 2010, ni en 2011 ni en 2012 se han pagado las anualidades corrientes. Han tenido que ser suplidas por el Gobierno de la nación", ha afirmado Cañete en Lleida, donde ha participado en la campaña de la candidata popular al Parlament, Dolors López.
El titular de Agricultura ha dicho que la Generalitat ha incumplido los compromisos de la red secundaria y no ha puesto en marcha los estudios técnicos para racionalizar la superficie afectada por las Zonas de Especial Protección para las Aves (Zepas).
Con estos dos argumentos Cañete ha explicado que "no hay una apuesta del Gobierno de la Generalitat por apoyar al sector agrario de Lleida puesto que la transformación en regadío es la que estabiliza producciones".
"Esto es sencillamente mentira", ha arremetido el conseller Pelegrí, quien ha asegurado que gran parte de la red secundaria ya está hecha, aunque ha matizado que la coyuntura actual obliga a desarrollarla donde hay una demanda de riego asegurada por parte de los regantes.
Así, la estrategia del Govern pasa por priorizar las zonas donde haya más demanda y retorno social, algo que el "Gobierno de Madrid no puede entender porque hacen obras sin ningún criterio de eficiencia económica ni social", ha considerado Pelegrí, quien ha ejemplificado este argumento con el desarrollo de la alta velocidad en Galicia.
En cuanto a los estudios de zonas zepa, ha apuntado que el Govern ha invertido un millón de euros para proponer alternativas creíbles, y ha indicado que "lo que no hace la Generalitat es ruido y declaraciones que sólo ponen en riesgo el proyecto".
LA SEGUNDA COMUNIDAD PEOR TRATADA
Pelegrí ha criticado que es el Gobierno español el que no apoya al sector bloqueando sus aportaciones al Programa de Desarrollo Rural (PDR) y paralizando los planes de modernización o la ganadería ecológica.
Además, ha asegurado que es el Govern quien está supliendo, por su "sentido de la responsabilidad", las ayudas a emprendedores que el departamento de Cañete ha dejado de transferir a Catalunya de una forma, ha dicho, partidista.
En este sentido, ha criticado que Catalunya es la segunda comunidad peor tratada de todo el Estado con una aportación comunitaria al PDR del 29,67%, un 25,93% procedente del Gobierno y un 44,4% asumido por la propia administración catalana.
Así, ha lamentado que mientras otras comunidades como Andalucía o Extremadura sólo deben complementar con un 16% su PDR, Catalunya debe hacerlo con una aportación del 45%.
Por su parte, el ministro ha ratificado "el compromiso del Gobierno de la nación de seguir apoyando la transformación en regadío y la modernización de zonas regables en Lleida".
El Gobierno, según ha dicho Cañete, "ha hecho una apuesta muy clara en el caso del Canal Segarra-Garrigues con una ejecución que supera los 202 millones de euros", y con unas obras en ejecución o programadas de cerca de 245 millones de euros.
