MADRID, 13 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Federación Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore), Andrés del Campo, solicitó hoy al Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino que no excluya a los representantes del regadío español de la mesa de trabajo sobre las tarifas eléctricas que se constituirá en las próximas semanas, con el fin de buscar soluciones consensuadas al encarecimiento experimentado por las tarifas eléctricas en los últimos tres años.
Según informó la Federación en un comunicado, la subida más reciente tuvo lugar el pasado mes de enero, coincidiendo con la entrada en vigor de la Orden ITC/3519/2009 que contempla un incremento de más de un del 20% en el recibo de la luz.
De este modo, Del Campo salió al paso de la reunión que la responsable de la Administración agraria española, Elena Espinosa, mantuvo ayer con representantes de las organizaciones agrarias y cooperativas, con el fin de diseñar el plan de choque que deberá sacar al campo español de la crisis.
Esta reunión parte del compromiso que el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, asumió con estas entidades a finales de diciembre, un mes después de la movilización convocada en Madrid y a la que se sumaron más de 40.000 regantes procedentes de toda España para solicitar, entre otras medidas, la aplicación de un IVA reducido para suministro eléctrico similar al de otros países europeos como Italia.
Según los regantes, sólo en el último año el término de energía en las tarifas de alta tensión para regadío se incrementó una media del 60%. Asimismo, la Federación llamó la atención especialmente sobre el incremento experimentado en el coste del término de potencia contratada por los regantes, que se ha duplicado en tan sólo dos años al pasar de representar entre el 25% y 40% de la factura eléctrica a más de un 60% en la actualidad.
Por ello, los regantes advirtieron de que este encarecimiento de las tarifas eléctricas puede poner en peligro la modernización de los regadíos ya realizados --de menor consumo de agua pero mayor demanda energética--, así como frenar la transformación de más de un millón de hectáreas prevista en la segunda fase del Plan Nacional de Regadíos Horizonte 2015.
