MADRID, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Senado ha aprobado hoy una moción, presentada por el senador de CiU,Ramón Alturo, por la que se insta al Gobierno a adoptar las medidas necesarias para desbloquear la construcción del canal de regadío Segarra-Garrigues (Lleida).
Para Alturo, el canal es uno de los proyectos hidráulicos más importantes de Catalunya, además de ser una infrestructura emblemática que dinamizará el sector de la agricultura a Catalunya, creando 4.000 nuevos puestos de trabajo y que permitirá el riego de 70.000 hectáreas y 77 municipios.
En opinión de la senadora del PP, Alicia Sánchez-Camacho, esta obra está bloqueada por "la incapacidad del tripartito y del Gobierno del presidente, José Luis Rodríguez Zapatero". Por ello, indicó que se debe a la "incompetencia" de dichos gobiernos que una infraestructura de estas características esté "inutilizada".
Sin embargo, para el senador del PSOE, Vicente Llanos, quienes realmente han desbloqueado este canal y han llevado el proyecto "hacia adelante", han sido los gobiernos de España y de Catalunya.
Asimismo, según destacó el senador por la Entesa, Josep María Batlle, los Gobiernos de Montilla y Zapatero han sacado "dos tapones" en el sistema Segarra-Garrigues. En concreto, el tapón de la financiación y el de la insuficiente declaración de zonas de especial protección para las aves (Zepa). "Ya no hay bloqueo, el canal se está construyendo", concluyó el senador.
El Govern aprobó la semana pasada la ampliación de 1.597 hectáreas de zonas Zepa, hasta superar las 42.500 hectáreas, más de la mitad del Segarra-Garrigues. De esta manera, se daba cumplimiento a dos sentencias del Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas.
La limitación de zonas Zepa supone la aplicación de medidas correctoras y compensatorias. La posibilidad de riego de las zonas protegidas se modulará en función de las condiciones de área y se formularán planes de gestión para cada una de las áreas.
El Govern aprobó ayer la expropiación de bienes y derechos afectados por la red de distribución de riego del Segarra-Garrigues en les Borges Blanques y l'Albi, lo que para el Ejecutivo catalán supone la continuidad de las obras del polémico canal tras la ampliación de las Zepa.
