BARCELONA, 20 May. (EUROPA PRESS) -
El candidato del PSC a la Alcaldía de Barcelona, Jordi Hereu, quiso premiar hoy a los militantes socialistas, con una gran parrillada en Les Planes, en la comarca del Vallès. El acto, en el que no hubo mitin, sirvió para que Hereu animara a los militantes a hacer frente a los convergentes durante la campaña.
Acompañado de unos 180 militantes, Hereu, que llegó acompañado de su mujer y sus dos hijos, se dedicó a repartir la mejor de sus sonrisas entre las mesas, en las que se sirvieron pan con tomate, ensalada verde, costillas de ternera, butifarra con judías blancas y alioli.
Conversó animadamente con los militantes más jóvenes y después aprovechó unos minutos para acercarse a la mesa donde comía la hasta ahora edil de Sarrià-Sant Gervasi, la socialista Katty Carreras, con otros compañeros de partido y jugar con un niño que no tendría más de dos años de edad.
Cerca de la zona reservada a los militantes, familias enteras observaban ajenas a la campaña electoral el tumulto que se organizó alrededor del alcaldable socialista. Incluso un hombre se le acercó para quejarse de que los "políticos sólo se acuerden de nosotros cuando llegan las elecciones".
En cambio, otros se dejaron arrastrar, ni que fuera por la presencia de cámaras de televisión y fotógrafos. Fue el caso de los comensales de una de las mesas cercanas, jóvenes veinteañeros, que se levantaron de sus bancos, máquina de fotografiar en mano, para pedir a Hereu que se dejara retratar con ellos.
No fue la única fotografía del día. La última fue la que Hereu se hizo con los periodistas que le siguen en campaña, que escogieron las palabras 'cohesión social' y 'proximidad', que repite incansablemente en todos sus mítines, para inmortalizar el momento.
