BARCELONA, 13 Dic. (EUROPA PRESS) -
El consejo de administración de la Agncia Catalana de l'Aigua (ACA) ha aprobado este viernes el Plan de sequía, una herramienta que sustituirá a los decretos y permitirá "mejorar la gestión de los episodios de escasez de agua en las cuencas internas de Catalunya".
Este plan, que se elevará al Govern para su aprobación definitiva, sustituirá la aprobación y aplicación de los decretos de sequía, que se activaban en situaciones de falta de agua y que comportaba medidas de gestión restrictivas y de aplicación global, ha informado la ACA en un comunicado.
El conseller de Territorio y Sostenibilidad, Dami Calvet, ha subrayado que el pla es un instrumento "esencial" para gestionar la vulnerabilidad en el contexto de emergencia climática.
El plan divide el territorio de las cuencas internas en 18 unidades de explotación, que se definen en función de los recursos de agua que se usan para garantizar las diferentes demandas y de la pluviometría, adaptándose a cada realidad.
Una de las novedades del plan es la activación de medidas preventivas antes de llegar a la situación de sequía, tomando mayor relevancia los recursos de agua no convencionales como la desalinización o el agua regenerada.
Pese a que el plan todavía no está aprobado --se eleva ahora al Govern para su luz verde definitiva--, entre finales de septiembre y principios de diciembre se activaron medidas para incrementar la producción de agua desalinizada en el sistema Ter-Llobregat, al disponer de menos del 60% de reservas, y con éstas se ha relantizado la disminución de reservas en los embalses.
El plan de sequía determina cinco escenarios en función del estado de las reservas del agua: normalidad (embalses al 60% de su capacidad o superior); prealerta (menos del 60%); alerta (40%); excepcionalidad (25%) y emergencia (16%).
En los escenarios de normalidad y prealerta se llevan a cabo medidas de previsión y gestión, y en los otros tres ya se contemplan de disminución uso del agua hasta llegar a la restricción en todos los usos --solo en la fase de emergencia--.
Catalunya ha vivido en los últimos 40 años siete episodios de sequía relevantes, y los embalses se sitúan en la actualidad en un 64% de las reservas, que la ACA seguirá con atención ante la previsión de pocas lluvias.
