Las agresiones sexuales atendidas en el Hospital Clínic se triplican desde 2005

L.Garcia Esteve, T.Echevarría, A.Vergés y F.Feu
L.Garcia Esteve, T.Echevarría, A.Vergés y F.Feu - EUROPA PRESS
Publicado: viernes, 22 noviembre 2019 15:11

Un 68% son violaciones y la mayoría se dan en menores de 25 años

BARCELONA, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -

Las agresiones sexuales atendidas en el Hospital Clínic de Barcelona se han triplicado desde 2005 --de 170 a una previsión de 475 este año--, y concretamente entre enero y el 31 de octubre de 2019 han subido un 5,32%, mientras que detectan que la intención de denuncia ha bajado especialmente desde 2016 de la mano del tratamiento de casos como el de La Manada, han explicado en rueda de prensa la coordinadora de Urgencias, Teresa Echevarría.

Desde 2005, el hospital ha atendido 3.712 casos de agresiones sexuales --concepto que incluye exhibicionismo, palabras obscenas, tocamientos y violaciones--, siendo la mayoría --91%-- mujeres, unos casos con una "tendencia ascendente" y que en la mayoría de las situaciones se materializa en violaciones.

DATOS DE 2019

Este 2019, por sexo, 336 de las agredidas han sido mujeres, y 60, hombres, en una proporción estable del 85% y el 15%, mientras que las agresiones son mayoritariamente a jóvenes menores de 25 años, y el segundo grupo más numeroso es el de 25 a 45 años.

No obstante, la chica más joven atendida tenía este año 16 años y la mujer más mayor, 83, ha avisado Echevarría, que ha precisado también que el 48% de las víctimas mujeres son locales y el 52%, extranjeras, sobre todo turistas y estudiantes del programa Erasmus.

Echevarría ha destacado que el 51% de las mujeres atendidas en Urgencias presentaba intención de denunciar, un dato que ha caído especialmente desde 2016 --el 70,8%--, con la incidencia social, mediática y judicial del caso de La Manada, cuyo impacto social ha sido disuasivo para las víctimas.

LA MAYORÍA, NO CONOCE AL AGRESOR

Entre las agresiones sexuales por tipo de agresor, el 30% de las víctimas femeninas conocía a sus agresores, aunque el 69%, no : "El gran grupo no conoce a quien le agrede. La mayoría son agresores desconocidos", ha dicho Echevarría, que ha detallado que en 94% de las agresiones solo era un agresor.

Sobre las agresiones sexuales, en el 68% de los casos ha habido violación: "La lesión o el problema de salud más frecuente en la asistencia es la violación", con agresiones con penetración mayoritariamente vaginal, ocasionalmente bucal o anal.

El lugar más frecuente --50%-- en el que se cometen las agresiones sexuales a mujeres es un domicilio; el 28%, en la vía pública, y el 9%, en discotecas y bares, yendo "contra el estereotipo de que las violaciones pasan en la calle"; además, el 60% de las mujeres agredidas refiere haber consumido alcohol o una combinación de alcohol y drogas, mientras que un 28% de las atendidas sospecha sumisión química.

La psiquiatra, Llusa Garcia Esteve, ha remarcado que la violencia sexual provoca problemas de salud cuya atención no se acaba en Urgencias, sino que deja secuelas a largo y corto plazo, como embarazos, traumatismos, enfermedades infecciosas y secuelas psíquicas: "La minoría saldrán ilesas desde el punto de vista psíquico".

Sobre La Manada, ha criticado que generó una situación de alarma social, aparte de cómo la justicia trató el tema con poca sensibilidad: "Muchas víctimas no se atreven a pasar por ese calvario", ha descrito Esteve, que forma del equipo que atiende estas agresiones en los dos programas de seguimiento del hospital: uno para la detección, profilaxis y tratamiento de enfermedades infecciosas, y el otro, para el tratamiento de las secuelas psíquicas.

Ha dicho que la violación genera cuadros de estrés postraumático equiparable al que viven las víctimas de un atentado terrorista, y que las secuelas pueden prolongarse hasta años después, generando "tendencia al aislamiento de las víctimas".

Ante esto, los programas del Clínic promueven el seguimiento de las víctimas, en un programa que tiene una adherencia del 32%, ya que muchas mujeres se han ido, o no responden al teléfono.*

La consellera de Salud de la Generalitat, Alba Vergés, ha lamentado que las víctimas de agresiones sexuales viven después, con la llegada del juicio, "un odisea social que hace revictimizar a la persona, sentirse culpable y pensar que nadie la cre, aparte del rechazo de buena parte de la sociedad".