BARCELONA, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Barcelona retomará las obras de construcción del aparcamiento subterráneo de la plaza Navas del barrio de Poble Sec sin preservar el refugio antiaéreo de la Guerra Civil situado en el mismo lugar porque se encuentra en un estado precario y "no es extraordinario", según dijo hoy el director arqueológico del Museu d'Història de la Ciutat, Ferran Puig.
Los trabajos están parados desde mayo, después de que la anterior concesionaria, la empresa vasca Urazca solicitara un procedimiento concursal --antigua suspensión de pagos--. El Ayuntamiento trabaja ahora para otorgar la concesión a la empresa municipal B:SM, una operación que se prevé terminar a finales de enero, tras lo cual podrán empezar las obras.
En una rueda de prensa, la concejal de Sants-Montjuïc, Imma Moraleda, explicó que se tiene que documentar y "archivar en la memoria" como era el refugio --que data de 1938--, pero no conservarlo, después de que un experto pudiera entrar en el refugio con el apoyo de los Bomberos, ya que algunos tramos se encuentran en mal estado. "No tiene interés patrimonial que se tenga que conservar", sentenció.
A pesar de que anteriormente se habían realizado 22 catas para localizarlo, no se sondeó una de las cinco entradas encontrada porque coincidía con un garaje de un bloque de pisos. El refugio, el 262 según la Junta Local de Defensa Pasiva, tiene un recorrido de unos 270 metros en forma de pasillo, de los cuales se ha podido acceder a la mitad. Está excavado en barro blando y hecho con ladrillos y cemento de Portland.
AL MENOS 1.400 REFUGIOS
El pasillo hace 220 centímetros de alto en su punto más elevado por 120 de ancho. Según Puig, se trata del único elemento sorprendente de este refugio situado en una ciudad donde se estiman al menos 1.400 refugios de la Guerra Civil, de los cuales "centenares" están en el Poble Sec. Probablemente se conserven las entradas, ya que no se verán afectadas por las obras.
El proyecto del aparcamiento contempla 404 plazas, de las cuales 155 se reservaron para los vecinos por un periodo de 50 años a un precio de unos 23.000 euros las de coche, y un poco más barato las de motocicleta. Un total de 104 residentes dieron en abril la paga y señal de 600 euros para adquirir una plaza.
Moraleda reiteró hoy que, a pesar de la nueva concesión, se mantendrán las condiciones de estas reservas. B:SM ya ha empezado a trabajar para hacerse suyo el proyecto del aparcamiento, para lo que está modificando las características de la cabina de cobro a las condiciones a las que tienen que estar los trabajadores de la empresa municipal.
