VIELHA (LLEIDA), 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Conselh Generau d'Aran finalizó hoy el proceso de restauración de los Terçons --divisiones geográficas propias de la Val d'Aran--, que fueron abolidas en 1834 y que hace un año empezaron a reimplantarse para acercar el Conselh a la ciudadanía. El último de ellos se inauguró hoy en Marcatosa.
El síndic de Aran, Francèsc Boya, ha hecho un balance positivo en el primer año de funcionamiento de esta figura institucional en los seis terçons en que se divide la Val d'Aran, cumpliendo el objetivo marcado: "acercar al Conselh Generau a los pueblos y crear la trasparencia de su política".
El Conselh de Terçons ha permitido tratar públicamente los hechos más cercanos a la ciudadanía en un espacio de diálogo y colaboración con la administración aranesa. Este hecho se repetirá en continuadas reuniones de carácter formal entre el Conselh Generau, los municipios y las diferentes entidades.
En la reunión, el síndic ha destacado entre otras actuaciones, la inversión en la viabilidad de carreteras con un importe de 168.000 euros, y las intervenciones de mejora en la conservación del conjunto histórico y cultural.
Entre ellas se destaca la reparación de la iglesia de Betlan, la mejora de las humedades de Rosèr de Aubert o la elaboración de las memorias historicoartísticas de la iglesia de Vilac y Arròs, declarados Bienes Culturales de Interés Local.
Marcatosa será uno de los principales beneficiados del Plan de Caminos, que cuenta con la inversión de cuatro millones de euros ante el gran número de mejoras que necesita, según ha confirmado Boya.
En el apartado de Patrimonio, Boya ha declarado que el Conselh Generau asumirá la mejora del acampanar de la iglesia de Sant Félix de Vilac, para garantizar el buen estado del valor artístico y turístico.
