El edificio del Museo del Gas de Sabadell recibe el mayor estándar en construcción sostenible

Martí Solà (Gas Natural Fenosa) y Raquel Clemente (US Green Building)
FUNDACIÓN GAS NATURAL FENOSA
Actualizado: viernes, 13 junio 2014 16:32

SABADELL (BARCELONA), 13 Jun. (EUROPA PRESS) -

El edificio de la Fundación Gas Natural Fenosa que acoge el Museo del Gas de Sabadell ha obtenido la certificación LEED ORO otorgada por la US Green Building Council, el estándar en construcción sostenible más prestigioso del mundo, que garantiza que la totalidad del edificio se ha diseñado y construido con los criterios de sostenibilidad más exigentes.

El director general de la Fundación Gas Natural Fenosa, Martí Solà, ha recibido el certificado y la placa que acredita el reconocimiento de manos de la representante de US Green Building Council, Raquel Clemente.

Para conseguir este reconocimiento, el inmueble ha tenido que cumplir con la aplicación de exigentes criterios sostenibles, tanto en la fase del proyecto de arquitectura e instalaciones técnicas, como en la fase de construcción, la puesta en marcha y utilización.

Entre otros elementos de sostenibilidad, el edificio destaca por el ahorro en el consumo de energía --del orden del 50%--, logrado gracias a diferentes medidas de eficiencia energética, y a una reducción del 90% del uso de agua potable respecto a un edificio tradicional, gracias a la reutilización de aguas grises y pluviales.

Además, está diseñado para aprovechar la luz natural y cuenta con luces de bajo consumo y un espejo energético que proporciona datos climáticos interiores y exteriores, así como el consumo que se produce en cada momento.

Todo el edificio dispone de ventanas con doble vidrio con cámara y persianas mecánicas para mejorar el aislamiento térmico y cuenta con una caldera de gas natural de alta eficiencia y los materiales utilizados en la envoltura de la nueva fachada son reciclados y de origen regional.

Otro aspecto destacable es que la madera utilizada, tanto en el suelo de la azotea como en las paredes y techos del edificio es el bambú, ya que el impacto de su tala es bajo y la fijación de dióxido de carbono es mayor que en otras especies.

Por último, todas las pinturas, adhesivos y moquetas empleados en el interior del edificio son de muy baja emisión de compuestos orgánicos volátiles, garantizando una elevada calidad ambiental interior.