BARCELONA, 7 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Conselleria de Enseñanza de la Generalitat ha replicado este viernes que el descenso del coste de escolarización no ha afectado a la calidad de la educación, puesto que la tasa de alumnos graduados ha pasado del 81,8% en el curso 2009-2010 al 86,5% en 2012-13, ha informado el departamento en un comunicado.
Enseñanza ha dado esta respuesta al estudio de la Fundació Jaume Bofill 'La agenda de la política educativa en Catalunya', que concluye que la política educativa entre 2011 y 2013 del departamento que lidera la consellera Irene Rigau es "ideológica".
Ha calificado las consideraciones del estudio de "poco rigurosas y sesgadas", y ha culpado a condicionantes externos como la crisis, los recortes estatales y el déficit contraído por los dos gobiernos tripartitos, que hipotecaron con 320 obras de centros el presupuesto futuro del departamento.
Ha desmentido que haya incrementado la inversión en los conciertos de la postobligatoria --especialmente en los Bachilleratos--, que se han mantenido, y ha recordado que precisamente la actual Conselleria ha cerrado grupos y escuelas concertadas.
Ante la crítica de falta de políticas para los centros con complejidad socioeconómica, Enseñanza ha detallado las acciones realizadas: ha mantenido la sexta hora en las 434 escuelas con peores condiciones sociales; se priorizará que sean estos centros los que tengan las ratios más bajas, y se ha realizado una auditoría pedagógica para ayudar a los que tienen resultados por debajo de la media.
También ha argumentado que para mantener la mejor distribución del alumnado con necesidades educativas especiales (NEE) por motivos socioeconómicos han ampliado las áreas de influencia en colaboración con ayuntamientos de ciudades como Barcelona, Mataró o Cornellà.
Sobre el despliegue "selectivo" de la Ley de Educación de Catalunya (LEC) que criticaba la fundación, la Conselleria ha expresado que tiene toda la intención de continuar desarrollándola con medidas como el futuro decreto de provisión de plantillas, la clasificación de centros actualizada, el plan de plurilingüismo y la mejora de la competencia lingüística del profesorado, entre otros.
