BARCELONA, 26 Abr. (EUROPA PRESS) -
Familiares de los docentes encausados del Institut El Palau, en Sant Andreu de la Barca (Barcelona), han dicho que los profesores están indefensos ante las acusaciones a raíz del 1-O y han negado que "señalasen a los alumnos hijos de guardias civiles, los humillasen o expresasen ningún sentimiento de animadversión hacia el cuerpo".
En una carta abierta que publica el diario digital Vilaweb recogida por Europa Press, explican este jueves que al día siguiente del 1-O se dio la opción a los alumnos de hacer un pequeño acto --en el patio a los de ESO o ante la puerta a los de Bachillerato-- que consistía en unos minutos de silencio, pero "no es cierto que se les obligase".
Añaden que en las aulas se permitió hacer un debate donde los propios alumnos podían hablar sobre los hechos del referéndum, aunque "en ningún caso los profesores impusieron su opinión".
Lamentan que la reacción de algunos padres ante un acto de "libertad de expresión" fue culpabilizar y denunciar a los docentes por un presunto delito de incitación al odio, y recuerdan que se han personado como parte acusadora 18 familias del millar de alumnos del centro.
También recuerdan que los profesores fueron citados a declarar en enero, que contestaron todas las preguntas y negaron las acusaciones, pero que la Fiscalía "ha dado credibilidad al atestado de la Guardia Civil, desatendiendo las declaraciones de los acusados".
"Nosotros, los familiares, denunciamos ante la opinión pública su indefensión. Recordamos que la Conselleria de Enseñanza está intervenida por el 155 y ha silenciado toda manifestación pública que contrarreste el relato imperante", remarcan.
FISCALÍA Y "CAMPAÑA MEDIÁTICA"
Critican la "campaña mediática que ha dado por buenos los argumentos de la Fiscalía sin esperar la acción de la Justicia", en la que confían, y que miembros del Gobierno central se han posicionado junto a la Fiscalía.
Remarcan además que estos profesores tienen una larga trayectoria y han sido siempre bien valorados por sus compañeros: "Resulta inverosímil acusarlos de hacer lo contrario de lo que han hecho siempre: educar en la convivencia y el respeto".
