Garrido afirma que la UE debe influir en política exterior aprovechando el "interregno" de poder en Estados Unidos

Actualizado: martes, 15 julio 2008 15:31

Asegura que España es el país que más defiende una sede del Secretariado de la Unión por el Mediterráneo, la de Barcelona

BARCELONA, 15 Jul. (EUROPA PRESS) -

El secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido, afirmó hoy que la Unión Europea debe impulsar su influencia en política exterior aprovechando el "interregno" de poder estadounidense hasta que hagan elecciones, y sin importar que sea Francia quien lidere ese impulso ahora que preside la Unión.

Durante un debate-coloquio organizado por la Fundación Cidob, afirmó que no hay que sentir "celos" del presidente francés, Nicolas Sarkozy: "Que protagonice lo que quiera; va en nuestro beneficio", y "si quiere ir lejos sobre el Mediterráneo, fenomenal".

Garrido constató que el "clima de confianza mutua" que ha habido en París en los últimos días es la gran aportación de la cumbre del Proceso de Barcelona: Unión por el Mediterráneo. Además, para él ha sido un éxito de toda Europa, y en el que España ha tenido un papel importante.

Aprovechó para reiterar la apuesta del Gobierno español por Barcelona para ser sede del Secretariado de la Unión por el Mediterráneo, y aseguró que España es el país que más defiende una candidatura para la sede, que se decidirá en noviembre.

El secretario de Estado elogió también la "política muy apropiada" de la Generalitat para contribuir a esa candidatura, y aseguró que la Secretaría de Estado para la UE considera una "prioridad" conseguirlo.

IRLANDA: NO IR DEMASIADO RÁPIDO.

Tras fijar el reto en política exterior de la presidencia francesa de turno en la UE, citó también como objetivos de afrontar el rechazo de la ciudadanía irlandesa al Tratado de Lisboa, sobre el que admitió la incertidumbre, pero se mostró optimista porque "habrá formas de tranquilizar a los irlandeses".

Aunque admitió la urgencia de conseguirlo, Garrido advirtió del peligro de ir demasiado rápido en solucionarlo, ya que un 'no' en un nuevo referéndum en ese país sería muy negativo ante la cercanía de las elecciones europeas de 2009, que esperó afrontar ya con la aprobación unánime del tratado. Si es así, destacó que será la presidencia española de turno (2010) la que encabece su aplicación.

En cuanto al apoyo de Chequia, auguró que "no podrá obstáculos" porque el Gobierno checo ya ha dicho al tribunal constitucional que el tratado respeta la constitucionalidad.

EJE HISPANO-FRANCO-ALEMÁN.

Otro reto francés es la política de inmigración, sobre la cual defendió la Directiva Europea de Retorno de Inmigrantes, porque "ninguna persona verá endurecida su situación; en todo caso, será mejorada", y reiteró que la política española en esta materia no cambiará.

López Garrido también aludió al Pacto Europeo de Inmigración, cuya aprobación da por hecha en octubre. Destacó que España consiguió que se cambiara la primera versión del texto, y subrayó que el resultado es un planteamiento hispano-franco-alemán --"un eje que nos interesa mucho", añadió--. Afirmó que el pacto da un "enfoque positivo" a la inmigración, para admitir que es "necesaria" en Europa como mano de obra, y para combatir la ilegal.

Sobre la presidencia española de turno, en 2010, destacó el objetivo de las políticas sociales; entre ellos, la igualdad entre hombres y mujeres.