BRUSELAS, 9 Mar. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Trabajo e Industria de la Generalitat, Josep María Rañé, se refirió hoy a los "visos de certeza bastante amplios" que llevaron a que su departamento impusiera una sanción de 24.000 euros a El Corte Inglés por discriminación de sexo y que fue recurrida por la empresa, por lo que se resolverá en los tribunales en los próximos meses.
Rañé hizo referencia a la decisión que adoptó la Generalitat en diciembre de 2005 de imponer una multa de 24.000 euros por cuatro infracciones de carácter "muy grave" contra los cuatro centros que tiene El Corte Inglés en Cataluña -en la Plaza de Catalunya, Avenida de la Diagonal y calle Bolivia en Barcelona y la de Montornés del Vallés- "por discriminación por razón de sexo", según indica la denuncia.
Explicó que la Generalitat decidió actuar después de una denuncia de CC.OO. contra el sistema de promoción de la empresa, donde, a pesar de que el porcentaje de mujeres empleadas es mayor que el de hombre, sólo eran estos quienes accedían a puestos de mando.
Rañé recordó que la denuncia indicaba que "los procesos de selección en El Corte Inglés tenían una proporción excesivamente exagerada en la que promocionaban a los hombres cuando la plantilla tiene una proporción mayoritariamente femenina", tal y como comprobó una inspección de trabajo.
Esta apreciación fue corroborada posteriormente por la Dirección General de Relaciones Laborales de la Generalitat, por lo que se decidió plantear una multa "porque no se estaban respetando los principios de igualdad en la promoción de las mujeres", dijo Rañé.
El Corte Inglés recurrió la sanción, por lo que el asunto se encuentra en el juzgado de lo Social que celebrará un juicio en los próximos meses, según fuentes de la Generalitat.
El consejero resumió el proceso diciendo que "ha habido una denuncia, somos la autoridad, hemos sancionado, la empresa ha recurrido y los tribunales verán si lo que hemos apreciado como una infracción y un atentado contra la igualdad de derechos de mujeres y hombres en el trabajo corresponde o no".
Admitió la "importancia" de este hecho "por la trascendencia social de la empresa", aunque advirtió que su departamento toma decisiones similares "varias veces al año, cuando vemos que una empresa no contempla los principios básicos de igualdad entre hombres y mujeres en el mercado de trabajo".
