LLEIDA, 17 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Federación de Hostelería de Lleida y la Federación de Comercio de Lleida se han comprometido con la Conselleria de Trabajo a contratar mujeres que hayan sufrido cáncer de mama si previamente han participado en los cursos de formación del departamento, que prepara un plan para dar prioridad en la búsqueda de empleo de este colectivo.
La directora de los servicios territoriales de la conselleria de Trabajo, Pilar Nadal, presentó hoy el programa en el que trabaja su departamento en Lleida. Ciudad donde la Sociedad Española de Senología y Patología Mamaria celebra entre hoy y el viernes su vigésimo sexto congreso.
Según Nadal, el impulsor de este programa es el presidente del comité organizador del congreso y jefe de la Unidad de Cáncer de Mama del Hospital Arnau de Vilanova, Edelmiro Iglesias. Él ha sido el coordinador del plan entre Trabajo, el hospital, la Sociedad Española de Patología y la Asociación de Mujeres Intervenidas de Mama de Lleida (ADIMA).
La apuesta de la Federación de Hostelería y la de Comercio forma parte de un programa que da prioridades a las mujeres operadas en función de varios criterios.
Para las mujeres operadas hace poco tiempo que están recibiendo tratamientos de quimioterapia, Trabajo propone facilidades para trabajar aprovechando las nuevas tecnologías; para aquellas que por su enfermedad han dejado de trabajar y quieran incorporarse, la Conselleria plantea ayudas para montar un negocio y formación con el compromiso, por parte de algunos empresarios, como los del comercio y la hostelería, de contratar al 60% de las mujeres que hagan los cursos.
Por último, Trabajo también contempla prioridad en la formación y en la contratación para las mujeres que sufran linfedema en los brazos. Las que tengan declarada una incapacidad del 33% podrían encontrar empleo a través de la asociación de discapacitados físicos Aspid.
Del congreso saldrá el llamado Protocolo de Lleida, que pretende sentar las bases para homogeneizar la asistencia sanitaria en España porque, según el presidente de la Sociedad Española de Senología y Patología Mamaria, Carlos Vázquez, la evolución de la enfermedad depende de muchos factores, como el estadio de la enfermedad, el ambiente en el que ha sido tratada y el lugar en el que se ha operado.
En Lleida se detectan cada año 350 nuevos casos de cáncer de mama, de los que el 99% son curables y en muchos de ellos no son necesarios tratamientos de quimioterapia. Según Edelmiro Iglesias, una de cada diez o doce mujeres sufre la enfermedad. El porcentaje de incidencia ha crecido un 2% en los últimos años en España, pero también el porcentaje de casos curables. Más de un 30% de las mujeres a las que se les ha detectado la enfermedad tienen menos de cincuenta años.
