BARCELONA, 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Cercle d'Estudis Sobiranistes (CES) concluyó hoy que si se celebrara en este momento un referéndum de independencia en Catalunya ganaría el 'sí' con el apoyo del 55%, mientras que un 45% la rechazaría. El CES así lo afirmó tras analizar los resultados de 21 encuestas sociológicas y política realizadas desde 1991 que incluían una pregunta directa sobre la independencia de Catalunya.
La mayoría de las encuestas fueron realizadas por el Instituto de Ciencias Políticas y Sociales (ICPS), seguido del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), el Periódico de Catalunya y la Universitat Oberta de Catalunya (UOC), en la que se formulaban diversas preguntas, entre las cuales: ¿Está a favor o en contra de la independencia de Catalunya?.
Ante un hipotético referéndum, el presidente de la fundación del CES y aún vocal del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Alfons López Tena, quiso concretar que para que ganara el 'sí' a la independencia deberían cruzarse los datos de los que actualmente están a favor y en contra de esta opción con el comportamiento electoral de los diversos sectores y segmentos sociales.
Tanto Tena como el investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Marc Belzunces -que presentó el estudio-- destacaron que una eventual victoria independentista en un hipotético referéndum dependería de los índices participación. Según el CES, la abstención favorecería a los independentistas, que acudirían a votar "en bloque".
Así, Belzunces argumentó que actualmente el apoyo social a la independencia se sitúa en torno al 35%, mientras que la oposición alcanza el 45%. El resto son indecisos o no se pronuncian. En caso de hacer una abstracción de estos porcentajes, 2 millones de personas anhelan la independencia de Catalunya, 2,7 millones están en contra y 1,1 millones no se define claramente con ninguna de las dos opciones.
MENOS POBLACIÓN, MÁS INDEPENDENTISTAS
En cuanto a la distribución territorial, puntualizó que en los municipios de hasta 10.000 habitantes, la opción independentista es mayoritaria, mientras que la opinión contraria se enmarca en las localidades de más de 150.000 habitantes.
"Ha habido una evolución territorial en esta cuestión", señaló Belzunces destacando que en todas las encuestas realizadas desde 2001 ganó la opción de la independencia con mayoría relativa.
"Esto es algo que en los años 80 y 90 no pasaba porque la mayoría de personas estaba en contra", añadió López Tena, que achacó esta evolución creciente del independentismo a la consolidación de la democracia y a la pérdida del miedo de los más jóvenes a defender sus opciones tras la dictadura franquista, al agotamiento de la autonomía, y a la no dependencia de Catalunya del mercado español desde la entrada del euro.
Por segmentos sociales, el presidente de la fundación del CES concretó que el perfil del defensor de la independencia es un votante de ERC o CiU, lector del Avui, El Punt o El Periódico en catalán, así como titulados universitarios y profesionales con buen nivel de formación y social, catalanohablantes, nacidos en Catalunya y también sus respectivos padres.
En concreto, sobre partidos políticos, a pesar de que CiU no es una formación "abiertamente" independentista, es el partido por el que simpatizan más independentistas, el 51% del total. ERC, por su parte, obtiene un porcentaje mayor de personas que defienden esta opción, pero tiene menos simpatizantes en números absolutos. Los partidarios del PSC, PP e ICV, son en su mayoría, contrarios a la secesión.
El estudio también concluye que las personas nacidas en Catalunya son en un 42,7% favorables a la independencia, en un 42,5% son indecisos, mientras que el 11,9 la rechaza. El 68,1% de los catalanes nacidos en el resto de España rechazan la independencia en un 68,1%, mientras que la apoyan el 17,2%.
En cuanto a los inmigrantes, el colectivo que concentra más partidarios de la independencia de Catalunya es el procedente de la Europa del Este. Concretamente, el 32% de los inmigrantes del Este defienden la independencia.
Los grupos que más rechazan la secesión son los de América Latina, Europa Occidental y el Magreb, con porcentajes que rodean el 45 y el 41%.
Además, las conclusiones del análisis reflejan que las personas que usan el catalán de forma habitual en casa son las favorables a la independencia, y los que usan el castellano son mayoritariamente contrarios.
También son partidarios de la independencia de Catalunya las personas que tienen un buen nivel de estudios y las que leen frecuentemente los periódicos, y muestran su discrepancia los colectivos que menos estudios tienen y los que no leen nunca la prensa.
SIMILITUDES CON EL QUEBEC
En la presentación de las conclusiones del estudio, además de López Tena y Belzunces, también estuvo presente la diputada soberanista de la Asamblea Nacional del Quebec (Canadá), Lizette Lapointe, quien expuso los "espacios de colaboración" que existen con Catalunya.
"La situación del Quebec y de Catalunya no es tan diferente como puede parecer. Tenemos problemas parecidos en lengua, cultura y en inmigración", manifestó Lapointe, destacando que si Catalunya fuera independiente estaría "bien posicionada por su PIB por cápita y su renta".
