BARCELONA, 6 Abr. (EUROPA PRESS) -
Representantes de colegios de ingenieros técnicos e industriales de España se reunieron hoy con el ministro de Industria, Miguel Sebastián, y la secretaria general de Industria, Teresa Santero, para exponer su preocupación por el despliegue de la Ley Ómnibus, que implicará, entre otros aspectos, que los visados profesionales pierdan su carácter obligatorio.
En declaraciones a Europa Press, el decano del Colegio de Ingenieros Industriales de Catalunya, Joan Vallvé, explicó que en el encuentro, que duró más de una hora, argumentaron las reticencias de los profesionales a la desaparición o reducción del ámbito del visado porque supondrá una clara merma en seguridad y protección.
Según Vallvé, el encuentro sirvió para aportar nueva documentación de los colegios que avalan su postura, aunque no escondió que los representantes de los colegios salieron "preocupados" por la sensación de que el ministerio que dirige Sebastián acabará acatando las directrices que dictará el ministerio de Economía sobre esta cuestión.
El decano de los ingenieros de Barcelona explicó que el ministro se comprometió a escuchar más la voz de los colegios profesionales y a estudiar toda la documentación remitida.
El Gobierno tiene previsto aprobar este mes un Real Decreto que determinará qué trabajos se tienen que visar y cuáles no.
Si finalmente sale adelante, el decano del Colegio de Ingenieros Industriales de Catalunya aseguró que no restarán inmóviles y se plantearán impugnarlo porque, insistió, en que se trata de una modificación que compromete la seguridad.
FRENTE COMÚN
El Colegio de Ingenieros Técnicos Industriales de Barcelona, el de Ingenieros Industriales de Catalunya y el de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Catalunya se unieron hace unas semanas para advertir de las "graves consecuencias" que puede tener para la seguridad de las personas un mal despliegue de la Ley Ómnibus.
Los tres colegios de ingenieros reivindicaron en un comunicado conjunto el mantenimiento de los visados para garantizar la seguridad de los trabajos técnicos y la colegiación obligatoria de los profesionales que desarrollen tareas que deben ser visadas, aspectos que rebaja la Ley Ómnibus.
Señalaron puntos sensibles que "inquietan enormemente el sector", como la falta de concreción en el método de control que debe garantizar la seguridad de los proyectos, así como la necesidad de marcar un tiempo de transición que permita adaptar el visado actual a las propuestas que regule el Gobierno.
