LLEIDA, 15 May. (EROPA PRESS) -
Un magistrado aragonés juzgará la demanda presentada el viernes por la asociación Amigos del Museo Diocesano en los juzgados de Lleida para que sea la justicia civil la que determine la propiedad de 83 de las 113 piezas que reclama el Obispado de Barbastro-Monzón al de Lleida. El caso ha sido asignado al Juzgado de Instrucción número 4 que tiene como titular al aragonés Jose Luis Martínez Suárez.
Al conocer la asignación de juzgado, el letrado de la asociación leridana, Francesc Sapena, preguntado si consideraba la posibilidad de pedir la recusación del juez, dijo que no había considerado esa opción. "Afortunadamente la imparcialidad de un juez no depende de su lugar de origen", afirmó.
La asociación basará su argumentación en el derecho de la usucapión, la adquisición de una propiedad mediante la posesión pacífica continuada durante el tiempo previsto por la ley. El despacho de abogados Sapena sostiene que en virtud del derecho la usucapión se podría certificar la propiedad de las obras.
Por lo que respecta al número de piezas, la asociación defenderá la propiedad de 83 porque el Obispado de Lleida ya ha reconocido que las veinte restantes las tiene en depósito.
El conflicto entre los dos obispados se gestó en 1995 con la segregación de 111 parroquias de La Franja, en Huesca, de la Diócesis de Lleida que se añadieron a la de Barbastro que pasó a denominzarse Barbastro-Monzón y comenzó a reclamar las obras al Obispado de Lleida.
Todas las resoluciones de la Iglesia, la primera en 1998, han sido favorables a Aragón. El momento más complicado llegó en 2005, cuando la Congregación para los Obispos ordenó la devolución de las obras.
El entonces obispo de Lleida, Francesc Xavier Ciuraneta, presentó un recurso de súplica en la Signatura Apostólica y a la vez pidió permiso a la Generalitat para devolver las obras. Obtuvo negativas en ambos casos. Un año después el Parlament de Catalunya aprobó una moción que aprobaba la unidad de la colección.
También en 2006, Ciuraneta presentó el recurso en el Tribunal de la Rota Romana que el tribunal eclesiástico más alto no ha admitido a trámite. Se lo comunicó al Obispado el lunes, tres días después de que la Asociación de Amigos del Museo Diocesano abriera la vía civil.
