Anuncia un recurso al Supremo y está convencido de poder contar con la caja de solidaridad
BARCELONA, 26 Jul. (EUROPA PRESS) -
El expresidente de la Generalitat Artur Mas ve "la vergüenza de la represión del Estado" en la sentencia del Tribunal de Cuentas que eleva 41.831,95 euros la condena que le impusieron junto a nueve antiguos miembros de su Govern por organizar el proceso participativo del 9 de noviembre de 2014, por la que finalmente deberán devolver 4.988.620,11 euros.
"Algunos están sufriendo la prisión, otros están sufriendo el exilio y otros estamos sufriendo las consecuencias económicas de todo", ha dicho en declaraciones a los periodistas.
Mas ha asegurado que "resistir, aguantar los golpes más duros, no es alegre ni gusta a nadie, pero forma parte de la defensa del derecho a la autodeterminación, de la de defensa del derecho a decidir, forma parte del objetivo de tener un estado para Catalunya, de querer tener un país soberano".
El expresidente ha anunciado que recurrirá la sentencia del Tribunal de cuentas al Tribunal Supremo y ha lamentado que la sentencia del Tribunal de Cuentas sea ejecutiva, es decir, que se puede proceder al embargo de bienes.
Por el momento, se han abonado 2,9 millones de euros procedentes de la caja de solidaridad impulsada por las entidades soberanistas y el resto "son los pisos de cinco personas que han quedado embargados", cinco miembros de su Gobierno --cuatro exconsellers y alto cargo--.
"Concretamente Joana Ortega, Irene Rigau, Francesc Homs, Jordi Vilajoana y yo mismo tenemos los pisos embargados y, a partir de ahora, ellos pueden subastar estos bienes, ejecutar la sentencia y por lo tanto perder estas cosas", ha lamentado.
Ha dicho ser consciente de que la caja de solidaridad "ha crecido mucho en los últimos tiempos" y se ha mostrado convencido de que en su caso y en los casos que intuye que vendrán en el futuro, podrán acudir a ella.
"Habrá la respuesta necesaria para que una poca gente, como nosotros, no tengamos que asumir el coste entero de algunas cosas que han significado la participación de más de dos millones de personas en las urnas", ha argumentado.
FUTURO POLÍTICO
Al margen de la multa económica, pesa sobre Mas una inhabilitación para cargo público que expira en febrero del próximo año y preguntado si su visita de este viernes a una reunión de las juventudes del PDeCAT se puede interpretar como un posible retorno a la primera linea política ha contesto: "Yo estoy activo y comprometido, pero esto no quiere decir necesariamente en primera linea.
"¿Qué pasará en los proximos meses? Ni yo mismo lo sé. Pasarán muchas cosas. La última cosa que en estos mementos me preocupa es qué pasará exacatamnte conmigo. Pero yo estoy activo y comprometido, pero esto no quieer decir necesariamente estar en la primera linea", ha incidido.
