Los Mossos dudan que el acusado de matar a una prostituta en Girona fuera agredido

Actualizado: martes, 28 febrero 2006 21:02

GIRONA, 28 Feb. (EUROPA PRESS) -

Los agentes de los Mossos d'Esquadra que atendieron las denuncias de Josep T.A., imputado en el asesinato de la joven albanesa Vjollak Papa en el año 2003, por unas presuntas agresiones encargadas por el proxeneta de la chica pusieron en duda estas agresiones.

Esta tarde declararon quatre agentes que atendieron las denuncias por agresiones, robo y amenazas que Josep T.A. denunció el 2 y 3 de abril de 2003. Uno de los agentes declaró que "las lesiones que presentaba el denunciante no concuerdan con una paliza que te dan tres personas que encima vienen con ese objetivo", contradiciendo la declaración de esta mañana del imputado.

Otro agente manifestó que una de las hijas del imputado le había comentado que "su preocupación porque no veía claro que lo que había visto en el piso (en referencia a la sangre) concordara con las agresiones denunciadas". En el mismo sentido se expresó el novio de ésta a otro agente, recordando el antecedente de la condena por asesinato que ya cumplió Josep T.A..

Además, el día 25 de abril, cuando los Mossos d'Esquadra detuvieron al acusado en el piso donde supuestamente se cometió el crimen, cinco días después de que apareciera el cadáver de la joven, encontraron bolsas de basura "parecidas a las que envolvían el cuerpo de la víctima", manifestó un agente.

Además, los agentes que participaron en la detención coincidieron en afirmar que "parecía que la muerte había sido violenta" a raíz de las manchas de sangre que encontraron por la casa (comedor, pasillo, baño, cocina y habitación) que, a pesar de que Josep T.A. aseguró a los agentes que había limpiado la sangre y había pintado parte de la casa, éstas eran perceptibles.

Josep T.A. se enfrenta a penas de prisión que oscilan entre los 20 años de cárcel que pide la acusación particular y los 17 que solicita el fiscal por la muerte de Vjollak Papa, de 22 años. Según la Fiscalía, después de asesinar en un piso de Girona a la chica, introdujo el cuerpo en un congelador del piso hasta que días después se deshizo del cuerpo en el lecho del río Güell.

Sin embargo, el acusado aseguró que la joven fue asesinada por tres magrebíes enviados por el proxeneta de la joven albanesa, 'Rudolph', en el piso de Josep T.A. en Girona. Estos tres hombres son los que le habrían golpeado a él cuando llegó al lugar.

El imputado ya fue condenado en 1991 a 15 años de prisión por el asesinato de una niña de 14 años en 1987 en Sant Hilari Sacalm (Girona), donde vivía en aquel momento.