Prevé alcanzar 200.000 unidades en 2016 y llegar a 250.000 y plena capacidad a partir de 2017
BARCELONA, 11 Nov. (EUROPA PRESS) -
El consejero director general de Nissan Motor Ibérica, Frank Torres, ha explicado este martes que la automovilística negociará con los sindicatos de la planta de la Zona Franca de Barcelona más medidas de flexibilidad en el nuevo convenio colectivo, que se debe firmar en enero de 2015, ya que el actual caduca a final de este año.
En declaraciones a los medios tras su intervención en el XXIX Encuentro de Automoción de Iese y KPMG en Barcelona, Torres ha explicado que el actual convenio ya prevé poder trabajar las 24 horas de los siete días de la semana, pero solo de forma puntual para dar respuesta a un pico de demanda, y ha señalado que lo que pretende la compañía es incluir en el nuevo convenio las medidas que permitan que este ritmo de producción sea permanente.
Ha señalado que se trata de un "convenio de futuro", ya que este nivel de flexibilidad permitiría ser más competitivos y poder optar a nuevas adjudicaciones a partir de 2017, cuando la multinacional japonesa lanzará su nuevo plan de negocio.
Torres ha detallado que la automovilística estima poder alcanzar las 200.000 unidades producidas en la planta de la Zona Franca en 2016 y que si mantiene el nivel de competitividad actual podría superar las 250.000 a partir de 2017, lo que ha subrayado que supondría crear 600 empleos directos.
Ha constatado que la factoría catalana cerró 2013 con 129.471 coches fabricados y cerrará este año con 122.296, teniendo en cuenta que desde verano se está produciendo solo con una línea, ya que se está adaptando la segunda para la nueva pick up, que se lanzará en octubre de 2015.
Ha detallado que en 2016, la producción rondará las 200.000 unidades, una cifra que se puede incrementar hasta los 264.000 vehículos gracias a las medidas de flexibilidad pactadas con los sindicatos.
Según Torres, para conseguirlo, la planta catalana debe reducir los costes en un 5% anual hasta 2016 -un 15% en total--; pactar un nuevo convenio --se debe aplicar a partir de principios de 2015-- con los sindicatos que permita trabajar las 24 horas y los siete días a la semana, y apostar por la innovación y la formación.
Ha constatado que la fábrica catalana ha reducido en un 41% los costes, pero ha subrayado que hay que hacer más para que en el futuro lleguen más modelos, lo que supone más innovación y la colaboración de las administraciones, los proveedores y los sindicatos.
A la administración, le ha pedido "que no ponga pegas" y que impulsen planes de competitividad e innovación realmente efectivos, y a los proveedores que reduzcan también sus costes anuales en un 5% y aumenten su flexibilidad.
Asimismo, ha remarcado la importancia de ir incorporando cada vez más proveedores dentro de la planta catalana; ha explicado que en estos momentos hay 22 y cuando se empiece a fabricar la pick up serán 32, y que la intención es que los proveedores de los proveedores de Nissan también se vayan incorporando a la factoría de la automovilística.
En cuanto a los sindicatos, ha celebrado el buen entendimiento que hay actualmente: "Nos hemos peleado en el pasado, pero hemos entendido que lo importante era colaborar".
