El Gobierno de Colau replica que el cambio responde a una modernización que quiere el cuerpo
BARCELONA, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
La comisión de Presidencia y Seguridad de Barcelona ha aprobado este miércoles a propuesta del PSC criticar "la imposición que supone la aprobación por decreto de Alcaldía, sin acuerdo ni consenso de los representantes sindicales" de la eliminación de la Unitat de Suport Policial (USP), que será sustituida por una nueva que se llamará Unidad de Refuerzo para las Emergencias y la Proximidad (Urep).
La proposición se ha aprobado con el apoyo de todos los grupos excepto el Gobierno de BComú, la CUP y el concejal no adscrito Joan Josep Puigcorbé, y también pide descartar procesos selectivos que limiten la libre movilidad funcional del personal y "el pleno desarrollo de su carrera profesional".
También reclama un acuerdo para dotar a la USP de los agentes y recursos humanos necesarios, en lugar de sustituirla por la Urep --que inicialmente iba a llamarse Unidad de Refuerzo a la Proximidad y las Emergencias (Urpe)--, con un decreto de Alcaldía que se firmará en los próximos días.
El comisionado de Seguridad, Amadeu Recasens, ha defendido que "no pasa nada por hacerlo por decreto" --ha recordado que también se creó así la unidad de playas y no ocurrió nada--, y ha pedido a la oposición dejar en paz a la Urbana, porque es el propio cuerpo el que quiere una modernización y aplicar su Plan Director, ha dicho.
Recasens ha asegurado que los agentes que forman parte de la USP pasarán a la Urep --harán una formación y habrá más agentes en la nueva unidad que pasarán pruebas-- y ha resaltado que las funciones de la USP se trasladarán a la nueva unidad, que no ejercerá como antidisturbios, algo que tampoco ha hecho la USP "en todo el mandato".
Ve imprescindible que haya procesos de selección para trabajar en la nueva unidad, aunque los actuales de la USP no verán afectados sus derechos, ha asegurado Recasens, que ha dicho que se ha negociado mucho con sindicatos pero que hay "determinados intereses particulares de que esto no siga adelante".
CRÍTICAS DE LA OPOSICIÓN
Desde el PDeCAT, Jordi Martí ha dicho que el Gobierno de Colau promueve el cambio sólo por una cuestión estética y ha pedido mantener y modernizar la USP --algo que harán si gobiernan, ha garantizado--, y Alberto Villagrasa (PP) ha dicho que se trata de una "vendeta personal de la señora Colau y sus amigos", como los de Can Vies, ha dicho en referencia a esta finca 'okupada' de Sants.
El concejal de Cs Paco Sierra ha asegurado que esta es "una prueba más del electoralismo barato de Colau", mientras que Carmen Andrés (PSC) ha apuntado que no ven ninguna necesidad de reformar la USP y más, ha dicho, cuando la ciudad está sufriendo el momento más grave de seguridad de la historia contemporánea de la ciudad.
Jordi Coronas (ERC) ha pedido a Colau tomar decisiones con criterios de eficiencia y no electoralistas, y le ha dicho que no toque nada antes de las elecciones, y la edil de la CUP Maria Rovira ha lamentado que se disuelva la USP y se cree un cuerpo con funciones similares: "Nunca se han depurado responsabilidades, tenemos que introducir elementos democratizadores y es en esta dirección que se deben aplicar los cambios", mientras que Puigcorbé ha pedido concreción en las funciones de la nueva unidad.
