Pitingo: "Los gitanos ya no tienen que ir de negro, con el pelo largo y encorvados, eso ya pasó"

Actualizado: domingo, 5 julio 2009 6:22

BARCELONA, 5 Jul. (EUROPA PRESS) -

El cantaor Pitingo presenta hasta el 12 de julio en el Teatre Tívoli de Barcelona el espectáculo 'Soulería', en el que da al flamenco "otro color", mezclándolo con la música soul a través de un coro de gospel, una propuesta con una gran acogida por parte del público que en un principio fue recibido con escepticismo por los puristas del flamenco.

El renovador de 'Killing me soflty' explicó en una entrevista a Europa Press que, como dice su canción 'Los tiempos están cambiando': "Los gitanos ya no tienen que ir de negro, con el pelo largo y encorvados, eso ya pasó", dijo. "Ahora los gitanos nos ganamos la vida, vamos a la universidad, gitanos nos casamos con payas, payos con gitanas, no pasa nada. Ese cambio tiene que notarse también en la música", afirmó convencido.

El cantaor recordó cómo Camarón, Paco de Lucía y Enrique Morente han sido duramente criticados por sus innovaciones. "Prefiero estar en el bando de los criticados que en el de los que pasan desapercibidos", afirmó, saliendo así al paso de los puristas que critican la fusión que él hace de flamenco y soul. "Esos puristas seguro que tienen hijos con cresta y piercing'. Y seguro que usan Internet, ¿o es que se comunican con código morse?", se preguntó.

Sin embargo, la actitud reacia del inicio contrasta con el éxito cosechado recientemente en uno de los festivales flamencos con más solera del país, el Potaje Gitano de Utrera (Sevilla). "Fue impresionante ver a toda la primera fila puesta en pie, lo más grande del flamenco estaba allí", aseguró. "Llevé un repertorio clásico para demostrar que sé de flamenco, pero al final no me pude aguantar y canté 'Mammy blue'", confesó entre risas.

La pasión de Pitingo por la música negra le viene de pequeño, cuando descubrió, por casualidad, una cinta de su tío con el 'Rescue me', de Aretha Franklin. "En mi familia no tenía referentes, mis padres eran muy 'caracoleros'. Lo más moderno que escuchaba mi madre eran Las Grecas", recordó divertido.

Desde entonces se formó en la música negra, aunque reconoció que jamás estudió solfeo, y ahora es capaz de coordinar un coro gospel con los palos del flamenco. "Los negros y los gitanos tenemos algo en común, somos razas que hemos sufrido mucho. Y ese dolor se nota en la música y en la voz. Cuando cantamos algo triste lo cantamos desde dentro del alma", dijo, recordando además uno de los momentos más emotivos de la gira, cuando cantó en Georgia (Estados Unidos).

Allí, en la tierra de su ídolo Ray Charles, Pitingo actúo delante de un público "80 por ciento de negros, y les encantó". 'Soulería' lleva ya dos años girando por España y le ha llevado también a Berlín, Londres, Nueva York e incluso a la India. El cantaor aseguró que ha perdido la cuenta de los conciertos: "Lo máximo que he estado sin actuar fueron 15 días, y porque me fui de viaje de novios", dijo, además de admitir que empieza a notar la voz "cansada".

"Claro que tengo miedo de quedarme afónico, pero cuando estoy mal imposto la voz y 'p'alante". El cantaor onubense aseguró que en cada concierto varía el repertorio y que a lo largo de la gira se han ido incorporando canciones nuevas. Tras un intenso mes de agosto, la gira finalizará en un teatro de Madrid entre octubre y diciembre.

"Hay que empezar a preparar el disco nuevo, en el que acabaremos de redondear 'Soulería'. Trasladaremos al disco las sensaciones que hemos tenido en el escenario, aunque es difícil. No es lo mismo estar ante 3.000 personas tocando palmas que sólo en un estudio con un técnico", dijo.

Antonio Manuel Álvarez Vélez, alias Pitingo, --que en caló significa presumido--, nació en Ayamonte (Huelva) en 1981 y conoció el éxito casi de casualidad. Tras un tiempo descargando maletas en el aeropuerto de Barajas conoció al ex componente de Ketama, Juan Carmona, una noche en un bar.

"Empezamos a cantar juntos, juntando flamenco y soul, y hubo feeling enseguida, confesó Pitingo", aunque añadió: "Y luego voy yo y no le llamo". Carmona admitió que fue él quién tuvo que dirigirse a Pitingo, empezando así un proyecto que de momento le ha dado doble disco de platino y todo tipo de reconocimientos. "Este chaval es puro arte", aseguró el guitarrista.