BARCELONA, 21 Dic. (EUROPA PRESS) -
El proyecto de división de Barcelona en 73 barrios y la posibilidad de trasladar el mercado de los Encants a la plaza de toros de la Monumental serán algunos de los planes municipales que se debatirán en el último Pleno del año del Ayuntamiento, que se celebra mañana.
Los grupos municipales del PSC y ERC aprobaron la semana pasada en comisión la división de Barcelona en 73 barrios. La propuesta no contó con el apoyo de ERC, socio del gobierno tripartito, que no se posicionó, a la espera de posicionarse mañana en el Pleno municipal.
La medida impulsada por el Ayuntamiento cuenta con el rechazo de CiU, el PP y de la propia Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (Favb), que han pedido la retirada de la participación de la ciudad en 73 zonas.
Barcelona contará con 73 barrios, aunque estas zonas estarán vacías de competencias. Las principales novedades del mapa son la partición de la izquierda del Eixample en dos barrios y la consideración de la montaña de Montjuïc y la Zona Franca como zonas especiales y no como barrios.
Uno de los cambios que ha causado más rechazo es la denominación de Antics Palaus para la zona comprendida entre el Born, Santa Caterina y Sant Pere, en Ciutat Vella. También ha causado malestar que el Camp de l'Arpa se segregue del Clot y la división del Poblenou en cinco barrios.
Durante el Pleno, los grupos municipales de CiU y del PP también preguntarán sobre la futura ubicación del mercado de los Encants de Barcelona, que el segundo teniente de alcalde de Barcelona, Jordi Portabella, (ERC) propuso el pasado viernes trasladar a la plaza de toros Monumental.
El anuncio realizado por Portabella levantó discrepancias en el seno del gobierno municipal. El propio alcalde Jordi Hereu lo desautorizó, aunque días después dejó abierta esta posibilidad, mientras que la tercera teniente de alcalde, Imma Mayol (ICV) mostró sus reticencias.
Esta posibilidad se debate después de que la empresa Balañá, propietaria de la Monumental, la única plaza de este tipo que aún queda en la ciudad, haya trasladado al Ayuntamiento su decisión de abandonar el negocio, por la que la ciudad se podría quedar definitivamente sin corridas de toros.
La inminente demolición de algunas naves de Can Ricart será otra de las cuestiones que CiU pondrá encima de la mesa. Los nacionalistas pedirán que no se toque ni una sola nave del recinto fabril hasta que el Parlament se posicione sobre la posibilidad de declarar el espacio bien cultural de interés nacional.
El grupo municipal que dirige Xavier Trias también presentará una proposición en la que pide al Ayuntamiento que aplique las medidas necesarias tras el informe realizado por la Síndica de Greuges que denunciaba que había entre 5.000 y 6.000 menores en situación de riesgo social en Barcelona.
Por su parte, el PP trasladará una propuesta en que pide al alcalde Hereu que presente en el próximo Pleno un documento para realizar un balance de su propia gestión municipal y preguntará al gobierno sobre la adquisición de un terreno en Montjuïc por valor de 10 millones de euros.
RECHAZO AL PROYECTO PRIVADO PARA LA MASÍA DE CAN FARGAS.
En el orden del día del Pleno, en el que el gobierno municipal aprovechará para presentar su balance de proyectos del mandato, con la correspondiente valoración por parte de los grupos de la oposición, se ha introduce un punto en el que se rechaza, definitivamente, el proyecto privado para la masía de Can Fargas.
En el pasado Pleno, los grupos municipales de CiU y PP acusaron al Ayuntamiento de haber dejado que se aprobara el plan privado para Can Fargas por silencio administrativo, mientras que el gobierno municipal, pese a reconocer que se trató de un error, señaló que se llevaría adelante el plan público.
La empresa Unicompta propone crear en esta masía, parte del patrimonio histórico de Horta, una escuela de hostelería, mientras que los vecinos, con el apoyo del gobierno municipal y de CiU y PP, defienden convertir el edificio en equipamiento.
El Ayuntamiento de Barcelona ya anunció el pasado mes de julio su intención de expropiar la masía de Can Fargas para asumir la titularidad de este edificio histórico, largamente reivindicado por los vecinos de Horta, e instalar una escuela municipal de música.
