BARCELONA, 1 Ene. (EUROPA PRESS) -
El primer catalán de 2010 fue una niña, Graciela, que nació pasados siete segundos en el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona y pesó 3,1 kilos.
Fruto de un parto natural y sin complicaciones, el bebé nació en perfecto estado y mide 48 centímetros.
Graciela es hija de Lucrecia Akeng, de Guinea Ecuatorial, y de Rafael Noguera, un chófer catalán que está en paro desde hace un año y medio. Ambos viven en Collbató (Barcelona).
En declaraciones a Europa Press, el padre dijo que le ha tocado "la lotería", mientras que la madre explicó que el dolor empezó a las siete de la tarde de ayer y que ni mucho menos pensaba que su hija estaba esperando el año nuevo.
La consellera de Salud, Marina Geli, visitó este mediodía a Graciela, que pesó 3,180 kilogramos, y la obsequió con un ramo de flores, un oso de peluche y un cambiador, como reconocimiento por ser la primera catalana del 2010.
También en Barcelona, y apenas 43 segundos más tarde nació Laia, en el Hospital de Sant Pau, con un peso de 2,87 kilos.
En la provincia de Tarragona también una niña tuvo el honor de ser el primer nacimiento del año, en concreto fue Siham, que nació a las 4:45 horas de parto natural.
En Girona en cambio el primer bebé del 2010 fue Aitor, que nació también de parto natural a las 4:36 de la mañana en el Hospital de Santa Caterina de Salt.
Más tuvieron que esperar en Lleida, donde el primer infante del año fue Adonai, el séptimo hijo de una familia de Barbastro, no llegó hasta las 8:27 horas en el Hospital Universitari Arnau de Vilanova.
El primer niño de padres residentes en Lleida llegó tres minutos más tarde en el mismo hospital y se llama Brian.
