BARCELONA, 3 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente del grupo de ERC en el Parlament y candidato a la presidencia del partido, Joan Puigcercós, se preguntó hoy si el pacto sobre el Estatut que rubricaron a principios de 2006 el líder de CiU, Artur Mas, y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero incluía un "acuerdo no escrito" para que el Tribunal Constitucional (TC) recorte el Estatut en vistas a los siete recursos que se han presentado.
En un apunte en su blog recogido por Europa Press, se preguntó: "Si el mismo Mas acordó con Zapatero que en Catalunya el PSOE no impediría que gobernase la lista más votada, ¿no habría algún otro acuerdo no escrito de que aún podría haber una segunda rebaja del listón estatutario?".
"¿Qué pactaron la noche del 21 de enero de 2006 en La Moncloa?", dijo Puigcercós, quien añadió: "Lo digo porque sorprende que se dejaran muchísimas cosas sin ligar o nadando en la ambigüedad como en el tema del reconocimiento de Catalunya como nación".
"CAMBIOS" EN EL GOVERN.
"Crear incertidumbre contra Catalunya y posibilitar cambios en el Govern parece en algunos momentos que sea la agenda política de Zapatero", dijo Puigcercós, ya que "seguro" que un pacto entre socialistas y CiU "en Madrid y Barcelona" facilitaría un acuerdo entre el PSOE y el PNV en el País Vasco.
"Si esto es así, el PSC tiene un problema y CiU también tendrá que dar explicaciones", afirmó, y sostuvo que un recorte en el Estatut repercutiría en el modelo de financiación autonómica que está negociándose, algo que "en tiempos de crisis, no es ninguna broma".
"ASFIXIA POLÍTICA Y ECONÓMICA DE CATALUNYA".
"A la vista de los últimos acontecimientos es creíble que, tal como el PP mueve por control remoto los miembros conservadores del TC, ¿el PSOE no tiene ninguna incidencia en el otro bando?", se preguntó Puigcercós, que también cuestionó si "los pactos de estado que Zapatero propuso al PP en el recién debate de investidura incluyen el TC".
"Si el TC diluye aún más el texto estatutario, estaremos asistiendo a una fase más de la asfixia política y económica de Catalunya", añadió Puigcercós, ya que ello implicaría un "choque frontal de legitimidades" entre el alto tribunal y los ciudadanos catalanes "que ratificaron en referéndum lo que ya había votado el mismo Congreso".
