El Ayuntamiento confía en que se acepte la declaración de zona catastrófica
FIGUERES, 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Ayuntamiento de Figueres ha explicado que la causa que provocó el hundimiento de un trozo de la Rambla el domingo fue un remolino de agua que se formó en la riera subterránea que pasa por debajo de este paseo debido al aumento de su caudal.
La alcaldesa de Figueres, Marta Felip, ha explicado en rueda de prensa que cerca del pavimento que se hundió hay la base subterránea del monumento a Narcís Monturiol: "esto formó un remolino debido a la cantidad de agua que bajaba" y rompió el muro de contención.
Felip, que ha calificado este episodio de lluvias como "el más importante de la historia en la ciudad", ha explicado que los informes técnicos demuestran que el agua no ha afectado a los fundamentos de los edificios.
Por el momento, no hay fecha para iniciar las obras definitivas para reparar el pavimento hundido de la Rambla, ni tampoco se sabe cuanto costarán las actuaciones.
En esta línea, la alcaldesa, Marta Felip, ha señalado que confían que el Gobierno acepte la declaración de zona catastrófica --el Ayuntamiento ya ha empezado los trámites-- para contar con más compensaciones para reparar los daños causados en Figueres y en otros municipios vecinos.
A parte de la Rambla, el cementerio de Figueres también ha quedado muy afectado por el agua, y otros edificios municipales como la escuela Anicet de Pagès, en el barrio de la Marca de l'Ham, que este martes tampoco podrá retomar las clases.
AYUDAS A LOS PARTICULARES
El Ayuntamiento de Figueres no ha cuantificado cuantos particulares han sufrido daños materiales, pero saben, por el momento, que la Guardia Urbana recibió 1.080 llamadas de emergencia la noche del sábado.
Para ayudar a los vecinos afectados, el consistorio habilitará este martes un punto de atención con un técnico especializado en siniestros para resolver dudas en relación a las aseguradoras.
