Renfe abre un "expediente informativo" para esclarecer unpresunto caso de racismo en un tren de Girona

Actualizado: martes, 23 octubre 2007 23:04

GIRONA, 23 Oct. (EUROPA PRESS) -

La compañía Renfe decidió abrir esta tarde un "expediente informativo" con el fin de esclarecer los hechos ocurridos con un pediatra cubano que trabaja en el Centro de Atención Primaria (CAP) Alt Empordà de Figueres (Girona) y que esta mañana denunció públicamente que un revisor por mantener una "actitud racista" al pedirle únicamente a él el billete de tren en un vagón donde viajaban otros 20 pasajeros con destino a Figueres.

Según explicó a Europa Press el afectado, Iván Ramos, que reside en Girona y se traslada cada mañana a la capital del Alt Empordà para ir al trabajo, el revisor de Renfe le pidió el billete sin disculparse por la demora que llevaba el tren y con una actitud "agresiva y grosera".

Ramos apuntó que no quiso mostrarle el ticket, que había comprado como todos los días, al considerar "incorrecta" la actitud del revisor. Por ello, éste decidió llamar a las "fuerzas del orden".

Según varios pasajeros, el tren llevaba más de 20 minutos de retraso cuando subieron en la estación de Girona, versión que confirmó esta tarde un portavoz de la compañía. Además, estuvo parado en la estación de Camallera (Girona) durante más de 30 minutos a la espera de que llegaran los agentes. Finalmente, el tren llegó a su destino una hora más tarde a causa del incidente.

"NO ES LA PRIMERA VEZ".

Iván Ramos, que utiliza este tren a diario desde hace tres meses, también explicó que "no es la primera vez" que los revisores tienen un trato distinto con los extranjeros que viajan en tren. Según suversión de los hechos, algunos de los pasajeros del vagón mostraron su disconformidad con la situación pidiendo al revisor que también les reclamara el billete a ellos y quejándose "indignados" de llegar todavía con más retraso.

Los pasajeros se amotinaron a favor del pediatra y exigieron al trabajador de Renfe que el tren continuara con el viaje. El portavoz de Renfe explicó a Europa Press que el pasajero "no quiso enseñar el billete" al revisor y, como indica "el protocolo" de actuación, para no "perjudicar" a los clientes, el revisor "solicitó la presencia de la fuerza pública".

La compañía ha abierto "un expediente informativo" para esclarecer los hechos, pero sostienen que en total el tren estuvo parado 20 minutos parado en la estación de Camallera, y no más de media hora, como explicaron los pasajeros.