Los restauradores denuncian ante el TC a las empresas de vales de comida y al Santander por imponer su sistema de cobro

Actualizado: martes, 6 junio 2006 11:06

BARCELONA, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -

La Asociación de Hostelería de la Comunidad de Madrid, con el respaldo de la Federación Española de Hostelería, ha presentado una denuncia ante el Tribunal de Defensa de la Competencia (TDC) contra las empresas emisoras de vales de comida y el Banco Santander Central Hispano (SCH) "por imponer el sistema de recaudación de cobro a los servicios de restaurante".

En la denuncia, la patronal hostelera de Madrid, más conocida como La Viña y que agrupa a 3.000 establecimientos, alega que las compañías que comercializan los conocidos ticket restaurante --Sodexho Pass, Cheque Gourmet y Tiket Restaurant-- junto con el SCH han vulnerado el artículo 1 de la Ley de Defensa de la Competencia.

Según la denuncia, a la que ha tenido acceso Europa Press, dicho artículo "prohíbe todo acuerdo, decisión o recomendación colectiva, o práctica concertada (...) que tenga por objeto, produzca o pueda producir el efecto de impedir, restringir o falsear la competencia en todo o parte del mercado nacional".

CONVENIO EXCLUSIVO CON EL SCH.

Estas empresas, todas ellas francesas y responsables de casi el 98% del mercado de vales de comida, han ideado un nuevo sistema de pago que sustituirá a los tradicionales ticket de comida de empresa por una tarjeta electrónica que, debido a un convenio exclusivo con el Banco Santander, sólo podrá ser leída por las máquinas de lectura de tarjetas de esta entidad.

Por ello, los más de 30.000 locales de restauración que aceptan estos ticket deberán comprar esta máquina que dispone de "dos pasarelas" para pasar tarjetas: una para las de crédito y débito y la otra para las específicas del vale restaurante, denunció el vicepresidente de la Federación Española de Hostelería y presidente del Gremio de Restauración de Catalunya, Gaietà Farràs.

En declaraciones a Europa Press, Farràs afirmó que "la mayoría de locales que aceptan estos sistemas de pago" son locales regentados por "familias poco profesionalizadas técnicamente" que "no se pueden permitir el lujo de perder un 10% de los clientes", por ejemplo. "Son prisioneros del sistema", aseveró.

COMISIONES "ABSOLUTAMENTE ABUSIVAS".

Farràs explicó que estas compañías intermediarias cobran "comisiones absolutamente abusivas a los restauradores" de entre el 4% y el 6% --a parte del IVA-- de cada ticket-menú, cuyo precio es de 7,80 euros. Además, criticó que estas empresas pagan a los propietarios del bar-restaurante de 40 a 60 días después de la entrega del ticket por parte del cliente.

"El problema", insistió Farràs, "es que con la nueva tarjeta electrónica quieren seguir cobrando estas comisiones y pagando con el mismo retraso cuando las nuevas tecnologías permiten superar esta situación". "A pesar de este avance, estas compañías quieren seguir manteniendo los privilegios de los que han gozado hasta ahora con los vales de papel", dijo.

"QUIEREN MANTENER SUS PRIVILEGIOS".

"Si un restaurador quiere cobrar en el mismo momento de la transacción, las empresas le cobrarán además una comisión de 0,75 euros, lo que significa un 10% del menú", afirmó Farràs, quien explicó que en la actualidad ha habido otras iniciativas empresariales que han establecido las tarjetas electrónicas como sistema de pago para vales de restaurante.

"Eso sí --matizó Farràs-- estas tarjetas, además de estar avaladas por una entidad bancaria, cobran una comisión del 1%, como en el resto de restaurantes, y el pago al restaurante es inmediato", explicitó.

Otra de las acciones denunciadas por Farràs para con estas empresas, que facturan 227 millones de euros al año, es que sus nuevas tarjetas electrónicas "no están avaladas" por ningún banco, como sí lo están las otras iniciativas, apuntilló.