BARCELONA, 7 May. (EUROPA PRESS) -
La consellera de Enseñanza, Irene Rigau, ha asegurado este miércoles que no prevé que la Generalitat tenga que costear el próximo curso la escolarización privada de aquellos alumnos que quieran estudiar en castellano y no puedan hacerlo en ningún centro público o concertado.
En una intervención en el Parlament en respuesta a una pregunta de la diputada de ERC Anna Simó, ha apuntado que esa propuesta sigue siendo analizada por el Consejo de Estado, "por lo que su aplicación en el próximo curso difícilmente será real".
La consellera ha explicado que ese apartado de la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (Lomce) tiene "un desarrollo complicado", lo que, a su juicio, ha hecho que el Consejo de Estado todavía no se haya pronunciado sobre ello.
Rigau ha señalado también que en el próximo curso la Generalitat desplegará sus competencias y se servirá de su margen de autonomía para preservar el currículum escolar, y ha puesto como ejemplo que mantendrán la educación musical en las clases de Primaria.
PORCENTAJE DE CASTELLANO
También en la sesión de control al Govern pero en respuesta a una pregunta de la diputada del PP María José García Cuevas, la consellera se ha referido a la última sentencia del Tribunal Superior de Justícia de Catalunya (TSJC) que ratifica la obligatoriedad de impartir del 25% de la enseñanza en castellano en cinco centros con niños de familias que han pedido educación bilingüe.
Rigau ha lamentado que se trate de alterar el modelo educativo catalán a través de los tribunales anteponiendo "la matemática a la lengua" con la fijación de porcentajes, y ha asegurado que la presencia de castellano en el sistema educativo está garantizada.
Ha reiterado que la Generalitat se guía por el articulo 10.1 de la Ley de Educación de Catalunya (LEC) que aboga por el dominio de las dos lenguas oficiales, y ha lamentado que muchos de los que hablan constantemente de bilingüismo "no lo practican nunca" y hablan siempre en castellano.
García Cuevas ha acusado a la consellera de incumplir las sentencias judiciales y recurrirlas constantemente para perjudicar a los ciudadanos, y ha asegurado que "lo hace por pura fobia que hermane a los catalanes con el resto de españoles".
