SEVILLA, 8 Ene. (EUROPA PRESS) -
La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, ha apelado este miércoles al nacionalismo catalán moderado, que, según se ha mostrado convencida, estará a la "altura" del momento histórico que vivimos.
En los desayunos informativos organizados por Europa Press y la Fundación Cajasol, ha indicado que lo que está ocurriendo en Catalunya es un "problema de todos", al que se está llegando tarde y permite que se polarice la población.
Díaz, que el domingo 2 de febrero visitará Catalunya, ha señalado que no se puede renunciar al diálogo y al entendimiento, y ha mostrado su preocupación por el posible "choque de trenes" que cada vez es más grave: el del nacionalismo independentista que no quiere rendir cuentas de las decisiones que está tomando en Catalunya, y el de la centralización, que no se preocupa de que Madrid se quiera convertir en un paraíso fiscal o que impide que Andalucía pueda ejercer sus competencias autonómicas.
"Esto solo va a tener salida dialogando, llegando a acuerdos y al entendimiento, como en el 78, y buscando la voluntad de vivir en común y para que podamos vivir en común, tenemos que querer hacerlo", ha expresado la jefa del Ejecutivo andaluz.
Para Díaz, hay que diferenciar entre el nacionalismo independentista y el nacionalismo moderado, al cual ella, de entrada, no le cierra la puerta, porque, al igual que en 1978, "estaría a la altura del momento histórico" que se atraviesa actualmente.
Ha insistido en que hay que hablar y buscar esos puntos en los que todos puedan sentirse cómodos, reconociendo singularidades y la pluralidad de los distintos pueblos españoles, pero, sobre todo, garantizando la igualdad de todos los ciudadanos dentro del proyecto de España.
La presidenta ha señalado igualmente que no hay que tener miedo a una reforma de la Constitución, con la participación de todas las fuerzas políticas, y ha mostrado su preocupación por que dicho texto se esté reformando por la "puerta de atrás".
Ha manifestado que, en más de tres décadas, hay cosas que han cambiado en la sociedad española y que tienen que ser reconocidas por la Constitución.
"Ante eso no tenemos que tener miedo al diálogo nunca", ha expresado Díaz, para quien la sociedad española es madura y capaz de afrontar el modelo de convivencia que en estos momentos se necesita.
Para Díaz, es el momento de revisar el estado de las autonomías, lo que en otros países se vive con normalidad: "Ha llegado el momento de pararse, de revisar y de decir cómo podemos seguir estando juntos más y mejor".
La presidenta también ha abogado además por que se abra ya un proceso de revisión de la aplicación del sistema de financiación, como se acordó por unanimidad en la última Conferencias de Presidentes Autonómicos.
El compromiso de la financiación, según ha lamentado, no se ha cumplido, lo que agrava la situación de determinados territorios.
