Se normaliza la circulación en la C-32 y la N-II, donde fueron obligatorias las cadenas para circular
BARCELONA, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los Bomberos de la Generalitat recibieron esta tarde unos 25 avisos por pequeñas inundaciones en algunos bajos y por cañerías que no engullían bien el agua después de la tormenta de nieve, granizo y lluvia. La mayoría de ellos se dieron desde diversos municipios de la comarca del Maresme (Barcelona), según informó a Europa Press el cuerpo.
Las máquinas quitanieves trabajaron en la C-32 --la Autopista del Maresme-- donde, junto con la N-II, se tuvo que circular con cadenas desde cerca de las 17.00 horas por el granizo y la nieve acumulados. También se restringió en ambas vías la circulación de vehículos pesados, según informó a Europa Press el Servei Català de Trànsit (SCT).
Los tramos afectados eran, en ambos sentidos de la circulación, entre los kilómetros 112 y el 126 de la C-32, y entre el 681 y el 673 de la N-II.
La circulación por ambas carreteras se ha normalizado, así como entre los kilómetros 19 y 27 de la BV-5111 --que conecta Arenys de Munt con Sant Pol de Mar-- y que estuvo cortada desde poco después de las 18.00 horas por la nieve.
Las condiciones meteorológicas originaron circulación con congestión entre el kilómetro 112 y el 117 de la C-32. Además, hacia las 16 horas, un monovolumen derrapó en el kilómetro 128 en sentido Barcelona a causa de la granizada, por lo que se produjeron algunas retenciones.
La lluvia provocó una visibilidad muy reducida en la AP-7, entre la Roca del Vallès (Barcelona) y Sils (Girona), y se registraron retenciones en el tramo comprendido entre el kilómetro 129 y el 133.
También se acumuló hielo y nieve en la BV-5114 a su paso por Santa Fe del Montseny (Barcelona), y sigue la visibilidad reducida en la BV-6001 en Malgrat de Mar (Barcelona).
Esta mañana las placas de hielo en la carretera BV-4243, entre Castellar del Riu y Rasos de Peguera (Barcelona), obligaron a los conductores a extremar la precaución en un tramo de unos 10 kilómetros.
