Un total de 110 voluntarios buscan al excursionista desaparecido hace diez dias en el macizo del Garraf (Barcelona)

Actualizado: sábado, 12 agosto 2006 16:45

BEGUES (BARCELONA), 12 Ago. (EUROPA PRESS) -

Un grupo de unos 110 voluntarios están colaborando en las labores de búsqueda del hombre de 77 años que desapareció el pasado 2 de agosto en el macizo del Garraf (Barcelona). Tres vehículos de los Bomberos de la Generalitat y efectivos de la Guardia Civil también estan rastreando la zona.

Uno de los hijos del desaparecido, Àlex Blanco, explicó hoy a Europa Press que en estos momentos "todo está pisado, quedan pocos sitios donde mirar" en las zonas en las que calculan que puede encontrarse el desaparecido y por eso ahora están dirigiendo la búsqueda hacia el norte.

Las hipótesis de lo que le ocurrió al hombre desaparecido, Óscar Blanco Sabella, quien fue visto por última vez a las 11 horas del pasado 2 de agosto en el camino de la Fita, "se van mutiplicando", asegura Blanco, pero los hijos mantienen la búsqueda, que cada fin de semana está atrayendo a numerosos voluntarios. El fin de semana pasado fueron 230 y este ha descendido a 110.

La desaparición ocurrió cuando el hombre se disponía a hacer una excursión. Al parecer se perdió y pidió indicaciones primero a una mujer y luego a un hombre de nacionalidad suiza, quienes le señalaron el camino de la ermita.

Más tarde, llamó a su familia desde su teléfono móvil y explicó que se había perdido y dijo que podía ver un peaje de la autopista del Garraf, supuestamente el del Vallcarca. Posteriormente, la familia le volvió a llamar por teléfono, pero ya no obtuvo respuesta.

NO SE HA LOCALIZADO LA LLAMADA

Ahora sus hijos aseguran que la compañía de teléfono "dice que no hay constancia de las llamadas" pese a que su padre "recibió cuatro llamadas" tres de una hija y una de los Bomberos de Sitges". El hijo relató que el juez ha ordenado que se investiguen las llamadas pero "según la Guardia Civil, la compañía de teléfono asegura que no hay datos en los repetidores de la zona".

Si se pudiera conocer el punto exacto en el que estaba el móvil cuando le llamaron este dato podría facilitar las labores de búsqueda, ya que, tras diez días rastreando la zona, no hay "ninguna pista de dónde puede ser", lamenta Blanco.

Sólo existen dos puntos desde los cuales el desaparecido pudo ver el peaje: "un acantilada en el que han trabajado escaladores, helicópteros y perros y una zona boscosa en la que han bajado incluso haciendo 'rappel'", y en ninguna ha aparecido rastro, relata el hijo

Los voluntarios están divididos en dos zonas de búsqueda. La base se ha establecido en Begues y los grupos están repartidos en Sitges y Olivella.

El desaparecido mide 1,78 metros de altura, es de complexión fuerte y tiene el pelo blanco. En el momento de la desaparición, vestía una camiseta azul marino y un pantalón corto de cuadros del mismo color. También llevaba gafas oscuras y una mochila ligera. Durante la búsqueda no ha habido rastro de ninguno de estos objetos.

Se trata de un excursionista habitual que, a pesar de sufrir algunos problemas cardiacos, había completado en dos ocasiones el camino de Santiago y tenía previsto emprender estos días su tercer viaje a Galicia.