Una veintena de personas ocupa varios pisos deshabitados en dos edificios de Ciutat Vella

Actualizado: lunes, 10 julio 2006 21:26

BARCELONA, 10 Jul. (EUROPA PRESS) -

Una veintena de personas ha entrado a vivir en varios pisos deshabitados de dos fincas del Barri Gòtic de Barcelona. Se trata de 23 nuevos ocupantes de 12 domicilios de los números 6 de la calle Amargós y 13-15 de la calle Magdalenes, muy cerca de la Via Laietana y la Catedral.

Los edificios, que forman parte de la misma manzana, según informaron los nuevos inquilinos, son propiedad de la cadena Hoteles Catalonia, que tiene previsto construir un hotel. Hasta el momento sólo quedan tres vecinos viviendo en estos inmuebles, que están en la misma manzana.

Esta ocupación se enmarca dentro de la campaña para la Promoción de Vivienda Realmente Pública (PHRP) y se adhiere a la Carta de Medidas contra la Violencia Inmobiliaria y Urbanística. Este documento, firmado por la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona, Arquitectos sin Fronteras y Plataforma por una Vivienda Digna, exige que se haga efectivo el derecho recogido en el artículo 47 de la Constitución Española y lucha contra el 'mobbing' inmobiliario.

En declaraciones a Europa Press, uno de los nuevos ocupantes de los edificios explicó que desde que entraron hace poco más de dos meses han rehabilitado alguno de los pisos y la escalera, que estaban abandonados desde hacía unos cinco años. Además, han acondicionado un local en los bajos donde realizan reuniones y todo tipo de actividades.

Este vecino explicó que este acto de "desobediencia civil" se ha hecho en unos edificios "paradigmáticos" de lo que ocurre en el centro de Barcelona.

Según este ocupante, el propietario legal del edificio, Hoteles Catalonia, ya les advirtió que lo que hacían era "ilegal" pero no ha querido negociar nada con los nuevos vecinos. Sin embargo, estos tampoco tienen constancia de que haya interpuesto ninguna demanda contra ellos.

Por su parte, desde el Distrito de Ciutat Vella admitieron conocer la situación, pero al ser una propiedad privada la Administración se ve limitada en sus actuaciones. Además, reconocieron que no hay peligro para la integridad de los edificios ni los nuevos inquilinos han causado conflictos con los demás vecinos.

Finalmente, fuentes de Hoteles Catalonia no pudieron precisar a Europa Press si el inmueble es de su propiedad.