MELILLA, 23 Jun. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de lo Penal número 2 de Melilla ha condenado al joven melillense F.M.R. a la pena de cuatro años de prisión como autor de la muerte del ciclista Juan Carlos Huelin la mañana del día 5 de marzo de 2017 en la carretera de Cabrerizas.
Según el auto al que ha tenido acceso Europa Press, es la misma pena que solicitó la Fiscalía, aunque muy inferior la demandada por la acusación particular que representa a la familia del fallecido, y que reclamaba una pena de nueve años de cárcel al añadir los delitos de seguridad vial y omisión del socorro.
El juzgado, además, le retira el carné de conducir por un periodo de seis años, frente a los cinco que pedía la Fiscalía y los diez de la acusación particular, que quería añadir otro delito más contra la seguridad vial y omisión del deber de socorro. La sentencia no es firme, y contra la misma cabe interponer recurso ante la Audiencia Provincial de Málaga, sección séptima con sede en Melilla.
HECHOS PROBADOS
En los hechos probados, la sentencia recoge que, a las 9,15 horas del domingo 5 de marzo de 2017, F.M.R., nacido en Melilla el día 6 de enero de 1991, con antecedentes penales, al haber sido condenado por sentencia firme de fecha 30 de marzo de 2015 por conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas, circulaba con el vehículo de su propiedad tipo todoterreno, con marca BMW X-5, en sentido ascendente por la calle Méjico, "después de haber ingerido bebidas alcohólicas, que le colocaba en una situación de incapacidad práctica para conducir".
Como consecuencia de dicho estado, que le impedía prestar la más elemental atención a las exigencias del tráfico, embistió con su vehículo a Juan Carlos Huelin García, que circulaba correctamente con su bicicleta por el margen derecho de la calzada en el mismo sentido, "impactando éste a consecuencia del impacto contra el parabrisas del vehículo, saliendo el conductor de la bicicleta despedido hacia delante, golpeándose con el bastidor metálico de una señal de tráfico y posteriormente con la pared de un edificio, abandonando tras el impacto el conductor del vehículo el lugar, dándose a la huida, dejando el cuerpo del ciclista en el suelo, inconsciente, sin prestarle auxilio, y sin bajar a comprobar su estado, siendo auxiliado por un particular, que se encontraba en el lugar, accediendo a su vehículo en el momento de la colisión, y avisó al servicio de emergencias 112".
Como consecuencia del atropello, el ciclista resultó con lesiones gravísimas, incompatibles con la vida, que motivaron su fallecimiento a consecuencia de un traumatismo cráneo encefálico y cervical.
INCAPAZ DE MANTENERSE ERGUIDO
El día del atropello, interceptado el conductor del vehículo por los agentes de las Policía Local y requerido por los mismos, le practicaron las pruebas oportunas de detección de alcohol. Así, en el laboratorio de análisis Clínicos del Hospital Comarcal, F.M.R., "arrojó un saldo positivo en etanol de 387 (T) mg/dl equivalente a 1,93 mg/l , a las 9,58 horas", es decir, siete veces más de lo permitido para conducir.
Practicada la prueba de alcoholemia en aire aspirado con etilómetro "dio como resultado 1,31 mg/l a las 11,30 horas y 1,28 mg/l a las 11,45 horas". En los hechos probados, señalan que presentaba a su vez, como sintomatología, olor a alcohol, ojos brillantes, habla pastosa, incoherencias, volumen elevado de voz, falta de conexión lógica en las expresiones e incapacidad de mantenerse erguido.
El ciclista fallecido Juan Carlos Huelin García se encontraba casado en el momento de su fallecimiento, y tenía dos hijos de corta edad.
F.M.R. se halla en prisión provisional por esta causa desde el día 6 de marzo de 2017.
