Actualizado 09/02/2008 15:43

Sucesos.-Descubren a un subsahariano en el hueco del depósito de combustible en la frontera entre Melilla y Marruecos

MELILLA, 9 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Guardia Civil anunció hoy que detectaron a un inmigrante subsahariano en el depósito de gasolina de un vehículo de la marca Renault 12, cuando, conducido por un ciudadano marroquí, éste se disponía a entrar a Melilla desde Marruecos.

Según informó hoy a Europa Press un portavoz de la 2006 Comandancia de la Benemérita, explicó que el depósito de combustible había sido quitado y el mismo lo constituía la chapa del suelo del maletero, "un ingenioso procedimiento y novedoso, que hace que desde el exterior no se vislumbre ninguna anormalidad", apuntó.

Los hechos ocurrieron en torno a las 7.00 horas en la Aduana de Beni-Enzar. Procedente de Marruecos, el coche de la marca Renault, de matrícula marroquí y ocupado por una sola persona, se sometió al primer registro selectivo sin que los agentes actuantes observasen nada irregular.

Sin embargo, fue interceptado unos metros más adelante, en las inmediaciones de la Aduana, donde la Guardia Civil establece controles de contrarregistros, cuando los agentes sometieron a un segundo registro al vehículo en el que inspeccionaron tanto la zona del maletero como del motor, no observando a simple vista nada anormal, dado que la apariencia de los enseres que se encontraban en el propio maletero y actitud del conductor marcaban el perfil de una persona que accedía a la ciudad para trabajar.

No obstante, el portavoz de la 2006 especificó que "un detalle de interés policial despertó las sospechas de los agentes, lo que motivó el traslado del vehículo al taller de la Comandancia donde se realizó un reconocimiento más profundo con desmontaje del maletero".

Este reconocimiento dio como resultado, tras la extracción de la chapa del suelo del maletero que accede al depósito de combustible y que está fijada con numerosos tornillos, la localización de un doble fondo en el lugar donde debía estar el propio depósito del vehículo, que había sido extraído y se le realizó una manipulación del hueco desde el interior para darle algo más de grosor y profundidad.

El portavoz apuntó que "lo singular de este doble fondo es que la propia chapa del maletero de unos dos centímetros de grosor era 'el depósito de combustible', de tal forma que desde el exterior no se apreciaba nada anormal, incluso ni tras examinar con detenimiento la zona del maletero, el motor o los bajos".

En el interior de este habitáculo se localizó a una persona de origen subsahariano, completamente aprisionado, que fue auxiliado para salir, acción en la que los guardias civiles tuvieron que emplear más de diez minutos tras extraer los tornillos de fijación de su estructura.

"La situación en la que se encontraba el inmigrante --aseguró la citada fuente-- era penosa, debido al lugar en el que se hallaba, sin apenas oxigeno para respirar, por la proximidad de los gases del motor y por las altas temperaturas que tuvo que soportar procedentes del mismo".

El conductor del vehículo es un súbdito marroquí, natural y vecino de Nador, de 22 años de edad, que atiende a las iniciales A.O., que pasará a disposición judicial como supuesto autor de un delito contra los derechos ciudadano extranjeros, conocido coloquialmente como "tráfico de inmigrantes".

El inmigrante es un varón, de 21 años de edad, indocumentado que dice proceder de Eritrea, y que será puesto a disposición judicial en calidad de testigo. Posteriormente, será entregado al Cuerpo Nacional de Policía a efectos de aplicación de la legislación vigente en materia de extranjería.