LOS ANGELES, 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
Jennifer Hudson está encantada con su físico. Después de ingresar el año pasado en un programa de control de peso, la cantante de 29 años ha perdido cinco tallas y está deseando actuar de nuevo para lucir su delgada figura. Insiste en que el control de peso es un estilo de vida y que no debe tomarse como capricho.
"No puedo esperar para volver a actuar con mi nuevo cuerpo", explica Hudson. La estrella de 'Dreamgirls' ingresó después de dar a luz a su primogénito en un programa de pérdida de peso. Ahora está en Nueva York ayudando a lanzar la nueva campaña de control de peso 'Lose for Good' (pierde para bien), enfocada a la lucha contra la obesidad y el hambre entre los jóvenes.
La cantante, que saltó a la fama gracias a 'American Idol', es portavoz de la organización 'Weigh Watchers'. Promueve la idea de que la lucha por mantenerse en forma es algo de por vida, no una moda o algo para tener mejor aspecto. "Es un estilo de vida, no un botón de encendido o apagado", insiste.
Además Hudson, de 29 años, está convencida de que su nueva figura le ayudará a aumentar su resistencia cuando dé inicio a la gira de promoción de su segundo disco a principios de 2011.
De momento, la cantante, que ganó un Oscar a mejor actriz secundaria por 'Dreamgirls' en 2006, está interpretando a Winnie Mandela en la película que trata la vida de la ex esposa de Nelson Mandela.
Ahora también está centrada en su segundo álbum, insistiendo en que quiere que la música sea "más flexible" y "más diversa": "Definitivamente quiero que sea más personal que el primer disco y hay más de mí, lo que quiera que sea, todavía no lo sé, pero lo voy a descubrir".
