Verónica Sánchez vuelve al cine con "Gordos"

Verónica Sánchez
Josefina Blanco
Actualizado: jueves, 24 septiembre 2009 13:30

Por M. J. Moreno

Verónica Sánchez pretendía dedicarse al mundo de las ciencias, pero a los dieciocho años cambió de rumbo para estudiar Arte Dramático. Empezó haciendo teatro pero donde más éxito cosechó fue en la popular serie "Los Serrano"; desde entonces no han parado de lloverle las ofertas en la gran pantalla: "El calentito", "Camarón", "Los dos lados de la cama", "Trece rosas" o la premiada "Mia Sarah" son algunos de los títulos que con tan sólo treinta años figuran en su curriculum.

Ahora acaba de estrenar "Gordos", una película de Daniel Sánchez Arévalo que como él mismo define es "una comedia dramática sobre los excesos", protagonizada por "unos personajes gordos físicos y emocionales, que para tapar su vacío interior deciden tragar". Junto a Verónica, trabajan en el filme, entre otros, Raúl Arévalo, Raúl Arévalo, Roberto Enríquez, Fernando Albizu, Pilar Castro o Teté Delgado.

-¿Cómo has llevado el asunto de engordar para esta película?

-Me propusieron engordar 10 kilos y dije que si era con este director haría lo que hiciera falta. Luego me pasó el guión y me enamoré de él y del personaje de Paula.

-¿Te dio miedo coger kilos?

-Ante el miedo que me tendría que suponer el hecho de que me quedaran secuelas tras engordar o la posibilidad de no verme bien me lancé a construir el personaje. Mientras engordaba entendí mejor el papel que iba a interpretar. Al principio tuve problemas para coger peso, porque el primer mes mi estómago no se acostumbró a una dieta tan calórica, engordaba dos kilos y perdía 3. Me empecé a preocupar, porque creía que no iba a conseguir engordar los diez kilos que me requería para empezar el rodaje, así que comencé a hacer vida sedentaria para no quemar ni una sola caloría subiendo las escaleras o bajando a la calle.

- ¿Lo pasaste mal?

- Sí, sufrí mucho, porque esa situación me llevó a un estado apático, estaba aburrida e incluso triste.

- ¿Cómo preparas un personaje?

- Normalmente cualquier cosa te inspira y te ayuda. Además de leer muchas veces el guión, desgranarlo entero y analizar secuencia por secuencia, intentas hablar con alguien cercano a los personajes*

- Es curioso que siendo sevillana no se te note el acento...

-Cuando no estoy trabajando me relajo y me sale una especie de mezcla rara, porque ya tengo muy interiorizado el castellano. Eso es algo que en la escuela de arte dramático machacan mucho, cuando vas a interpretar un Shakespeare no puedes hablar con acento andaluz.

- ¿Te costó mucho adaptarte a la ciudad de Madrid?

-Yo me adapté muy bien. Al principio tenía muchas ganas de salir de Sevilla, aunque es una ciudad que me gusta. Tenía muchas ganas de irme, de emprender mi vida por mi cuenta. Tenía tantas ganas de ser independiente y de vivir en una ciudad nueva que cuando llegué a Madrid no me sentí forastera. No puedo decir que eché de menos Sevilla, pero sí a mi familia, a la gente que se había quedado allí, los bares a los que iba con mis colegas y los rincones donde tienes tus recuerdos. Pero creo que podría vivir en cualquier sitio, me adapto bastante bien.

-¿Qué faceta oculta y sorprendente escondes que no conozcamos hasta ahora?

-Me temo que soy bastante normalita..., pero me gusta mucho cocinar y dicen que se me da bien. Me gusta investigar nuevos platos y tengo la cocina llena de cacharros.

-¿Qué aficiones tienes?

-Ir al cine, leer, conversar, salir a comer, viajar...

-¿Cuál es tu especialidad gastronómica?

-Tengo varias: las migas, que son una receta de mi abuela, y el salmorejo, que me sale bastante bien.

-¿Cómo es Verónica Sánchez detrás de las pantallas y escenarios?

-Pues me cuesta definirme, no se muy bien como soy. La gente me conocía antes sobre todo por mi papel de Eva en "Los Serrano" y la verdad es que soy muy diferente a ella porque entre otras cosas, nos llevamos diez años de edad. Me cuesta mucho trabajo definirme porque a veces soy muy tranquila, y otras veces muy nerviosa, unas muy paciente y otras impaciente. En realidad soy muy contraria.

-¿Qué haces cuando no trabajas?

-Me gusta cuidarme, estar con mi gente y mis amigos e ir al cine. Si tengo un poco más de tiempo y me lo puedo permitir, me gusta viajar.

-¿Echas de menos una serie como "Los Serrano"?

-No, esa etapa ya esta cerrada, llega un momento en el que ya no puedes aportar nada nuevo al personaje y el personaje a ti tampoco, hay que saber darse cuenta entonces y dejarlo a tiempo.

-Desde que "Los Serrano" te acercara al gran público, ¿cómo has vivido la fama y la popularidad?

-Con "Los Serrano" llegamos a tener ocho millones de espectadores, era imposible salir a la calle y no cruzarte con nadie que no la hubiera visto. Pero intento no darle mucha importancia a eso porque es algo que no depende de mí y es efímero. No es bueno ni acostumbrarse ni sufrir por la fama.