MADRID, 8 Jun. (CHANCE) -
Tras 70 años del desembarco de Normandía, uno de los hechos que marcaron el transcurso de la Segunda Guerra Mundial, mandatarios de todo el mundo se han reunido en el Castillo de Bénouville. François Hollande, presidente francés, ofreció un almuerzo de gala a personajes tan destacados como los reyes de Holanda, Guillermo y Máxima.
Pero, sin duda, la presencia más destacada del acto fue la de Barack Obama. El presidente estadounidense destacó por su amabilidad y sentido del humor, como ya ha demostrado en varios de sus discursos. No dudó en entablar conversación con los reyes de Holanda, compartiendo momentos muy divertidos con ellos.
De hecho, Obama puede presumir de ser de los pocos que han conseguido hacer reír en público al Príncipe Carlos de Inglaterra, que acudió al llamado `Día D junto a su madre, la reina Isabel II. Las imágenes hablan por sí solas y no cabe duda de que Carlos de Gales pasó un buen rato junto al presidente de Estados Unidos, con el que no dejó de reírse en ningún momento.
Además, Obama también derrochó simpatía con el anfitrión del almuerzo, François Hollande, y con los reyes de Bélgica, que también acudieron a la destacada cita.
Barack Obama ha demostrado ser uno de los presidentes estadounidenses más carismáticos y bromistas y, de hecho, hace poco ha sido protagonista de un vídeo viral en el que aparece haciendo musculación en un hotel de Polonia.
