MADRID, 13 Nov. (CHANCE) -
Laura Sánchez fue una de las invitadas que no se perdió la presentación de la nueva ginebra 'Guadalquivir' en Madrid. Allí, la modelo coincidió con grandes amigos como Paco León y Amaia Salamanca, muy elegante con un traje de Bleis Madrid.
Por su parte, Laura Sánchez puso el toque rockero con un total look de Dolores Promesas que le quedaba perfecto. La sevillana aprovechó la ocasión para abrirnos su corazón y explicar que este 2019 no ha sido fácil para ella. Su disputa con Aitor Ocio, padre de su hija Naia, le ha llevado de nuevo a los juzgados. Una situación que le ha supuesto más de un quebradero de cabeza: "No ha sido un año fácil. Hay otros años que son más fáciles, del 2019 me quedo con el resumen de que no ha sido nada fácil pero que he aprendido muchísimo. He aprendido a vivir, a valorar lo que realmente importa así que he hecho mucho trabajo conmigo misma, sigo haciéndolo, me queda mucho por hacer pero al final, mientras que haya salud, no pasa nada".
Aún así, el apoyo y el abrazo de David Ascanio ha sido fundamental: "Lo único de lo que soy consciente es de todo lo que hemos viajado, todas las cosas que hemos hecho juntos, de eso sí porque hay documentos porque si no se me hubiera olvidado también. Tengo muy mala memoria. Muy bueno porque se me ha pasado muy rápido, las cosas bonitas pasan rápido".
Y es que para Laura una de las mejores cosas que le ha acompañado en los momentos malos es la confianza en uno mismo: "Es maravilloso querer y quererte".
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