MADRID, 11 Nov. (CHANCE) -
Anoche se celebraron los People's Choice Awards, unos galardones creados por el medio de noticias estadounidense E! News hace ya 45 años. Durante un par de meses, el público puede votar a sus nominados favoritos mediante las redes sociales y la propia página web, convirtiéndose así en el verdadero jurado de los premios. Este año, Pink, Gwen Stefani y Jennifer Aniston han sido galardonadas con premios especiales a su trayectoria, mientras que Zendaya, Vengadores: Endgame, Shawn Mendes, Cole Sprouse y Stranger Things se han convertido en algunos de los favoritos de la noche, llevándose a casa hasta dos estatuillas.
Pink fue premiada con el galardón People's Champion 2019, un premio que se otorga a aquellos famosos que han demostrado su interés por ayudar a los demás participando en diversas iniciativas organizadas por ONGs y asociaciones. En el último año, la embajadora de UNICEF ha colaborado con hasta seis organizaciones y ONGs de una amplia diversidad, desde apoyo a los derechos de las personas al amparo de los niños con pocos recursos. Por eso mismo, la cantante ha sido escogida como ejemplo a seguir este año por los PCA.
UN DISCURSO CON UN GRAN MENSAJE
La estrella, que acudió a la gala acompañada por sus adorables hijos, subió al escenario emocionada a recoger su galardón: "Gracias. Eso no vale, queréis hacerme llorar", comenzó diciendo mientras miraba la estatuilla entre sus manos. "Es un honor haber sido premiada con el People's Champion. Miro a este premio y recuerdo a Rocky Balboa, algo que es apropiado porque soy de Filadelfia, me gusta usar pantalones de deporte y me gusta pelear con la gente. Crecí en una familia muy activa, de boxeadores, de hecho. Y sé que una sola persona puede marcar la diferencia. Tú crees que no importas, crees que tu vida no es importante. Pues involúcrate", continuó diciendo.
"No puedes decirme que Martin Luther King Jr., Rosa Parks, Nelson Mandela, Gloria Steinem, Anita Hill, Ruth Bader Ginsburg, Malala Yousafzai, Greta Thunberg son... no, mejor, dime una persona que no haya marcado la diferencia. Soy una tonta que proviene de Doylestown y me las he apañado para cambiar una pequeña parte de mi pequeño mundo. Hay muchas cosas que hacer", añadió con fuerza, provocando la emoción entre el público.
"No me importan tus ideales políticos, me importan tus hijos. Me importa la decencia, la humanidad y la amabilidad. La bondad puede ser hoy en día un acto de revolución. Hay personas que no tienen lo que tú tienes, así que, ayúdales a conseguirlo. Nuestro planeta necesita ayuda y ayudar nos hace sentir bien. Nos hace sentir poderosos. Dejad de pelear entre vosotros, reunid a vuestros amigos y cambiar el puñetero mundo. Gracias", finalizó la cantante, bajando del escenarios entre aplausos y gritos emocionados. Un discurso breve pero poderoso, cargado de significado e intención. ¡Felicidades Pink!
